El waterpolo aragonés vive un momento difícil. A su ya quebradiza salud se ha unido el notable descenso en las ayudas públicas en el último presupuesto del Gobierno de Aragón. La Escuela de Waterpolo de Zaragoza (EWZ) era uno de los clubs que menos dinero recibía. En el último ejercicio consignado, una partida de 37.517,71 euros (28,9% del presupuesto), ya menguada con respecta a otras anteriores, al igual que las del resto de equipos de élite de la comunidad.

"Aún no nos hemos sentado para plantear qué vamos hacer en concreto porque no tenemos una cifra confirmada (solo se conoce que el montante global pasa de 1,72 millones a 820.000 euros, pendiente de repartir).Tendremos que hacer equilibrios", dice Jesús Montaner, presidente de la EWZ.

Montaner no cree que el descenso en las ayudas vaya a afectar sobremanera a la cantera, ya que la EWZ siempre ha intentado diferenciar entre el primer equipo y el resto de la estructura con las categorías inferiores: "Siempre hemos tratado de mantener la élite a raíz de las ayudas. En ese aspecto intentaríamos que no nos afectara. Siempre tratamos de que no incida directamente a la base".

Los problemas

Por ende, sería el primer equipo el principal afectado. Desde el club barajan las siguientes opciones para ajustar el presupuesto: el recorte de las horas de entrenamientos, en los salarios de los entrenadores y el aumento de las cuotas que tienen que abonar las jugadoras del primer equipo. Es más, los técnicos aún no han podido cobrar enero y hasta que no reciban la ayuda del año pasado, todavía no liquidada, tampoco podrán hacerlo con febrero. "Estamos esperando a que en marzo nos lleguen las ayudas del Gobierno correspondientes a la temporada pasada para poder cobrar", explica Francisco Orizo, el entrenador del primer equipo.

Cuando se le pregunta sobre el futuro, Orizo es franco: "Si te digo que no, miento. Quizá no a corto plazo porque la estructura está bien montada, pero si esto sigue en estas condiciones habría que recortar mucho en la faceta competitiva". Además, Orizo cree que si algún día la EWZ desciende de la División de Honor, el futuro sería "muy negro", debido a que se dejarían de recibir ayudas públicas y el gasto en viajes aumentaría por la diversidad geográfica.

Otro afectado es el Gersan Helios, que al no competir en la máxima categoría no recibe ninguna ayuda pública: "Es sorprendente que no tengamos una pequeña ayuda, aunque dispongamos de nuestros propios recursos", dice Antonio Sánchez, coordinador deportivo del waterpolo del CN Helios. La última jornada de este deporte que acogió el clausurado Parque Deportivo Ebro allá por el 2013 dejaba claro el nivel de Aragón. El Helios jugaba en la División de Honor masculina, y la EWZ tenía dos equipos: el femenino estaba luchando por los puestos de playoff en División de Honor y el masculino competía en Primera (segunda categoría). A día de hoy, la pérdida de competitividad es palmaria. El Helios está en Segunda (tercera categoría a nivel nacional) y las chicas de la EWZ pelean por la salvación, mientras que el equipo masculino no existe.

Por ello ambos clubs, aparte de las ayudas públicas, creen que es importante mejorar las instalaciones públicas en las que se pueda entrenar adecuadamente. "Actualmente en ninguna instalación pública de Zaragoza se puede practicar adecuadamente ni natación ni waterpolo de competición", asegura Antonio Sánchez. Lo mismo asevera Montaner: "En el tema de instalaciones estamos bajo mínimos. Si seguimos con esta dinámica, el futuro pinta negro y el waterpolo será un deporte extinguido en la comunidad de Aragón".