El 14 de julio se cayó Alberto Contador y abandonó. Ese día sonaron los teléfonos en la capital francesa, porque en París estaban los dueños de ASO, los propietarios del Tour. Eran llamadas de preocupación. ¿Qué será del Tour? ¿Qué pasará con las audiencias? Quedaban 15 días, una eternidad. "Estaban muy preocupados en París, ese día creyeron que el Tour podía ser un desastre", afirma una persona conocedora de lo que sucedió esa jornada.

Luego llegó, sobre todo, la explosión francesa con los jóvenes Pinot y Bardet y el veterano Péraud y los dos podios locales después de 30 años. El Tour se disparó como nunca en Italia y en España Valverde mantuvo la llama encendida.

Sin embargo, la situación en carrera, según todos los expertos consultados, habría sido distinta, aunque hubiese ganado Nibali. Y de esta circunstancia participan hasta los periodistas italianos. La Gazzetta dello Sport comenzó la prueba con dos enviados especiales y la ha acabado con cinco. "No tengo la certeza de la victoria de Nibali frente a Froome y Contador. Habría sido un Tour diferente, aunque sí estoy seguro de que Nibali estaba al mismo nivel que ellos dos y que seguramente habría tenido suficiente con manejar la diferencia que logró en el pavés", opina Ciro Scognamiglio, especialista del principal diario deportivo italiano.

Para Álex Sans, el director del NetApp, "con las diferencias que ha sacado Nibali no creo que la general hubiera cambiado mucho. Los tres se habrían reservado para atacarse en los últimos kilómetros. Quizá Nibali habría sido más conservador". Todos los expertos consultados --Poulidor, Delgado, Ellingworth, Riis, Unzué y Scognamiglio-- coinciden en que habría sido otro Tour.