O no es el mismo equipo o el Zaragoza se tendrá que plantear la iniciativa de jugar todos sus partidos fuera de casa. Las dudas no son gratuitas y nacen de la doble dimensión que jornada tras jornada trasmite el filial zaragocista.

El Zaragoza B en sus partidos a domicilio juega siempre al límite, tiene pocas posibilidades de marcar en jugadas aisladas o, como ayer, pierde porque su juego es tan rácano y escaso que cualquiera puede ganarle. El Osasuna B aprovechó este punto débil y capturó un triunfo por la mínima en la Ciudad Deportiva.

El Zaragoza B no existió en la primera parte. Sólo tres acciones del delantero visitante Markuleta dieron algo de brilló al juego. En una de ellas (min. 38), logró enviar el balón al poste derecho de Miguel. En la segunda parte, los locales estiraron las líneas pero sin mucha autoridad ofensiva. En este contexto llegó la gran jugada del gol. Fran Moreno supo leer la salida del fuera de juego de la defensa aragonesa y en vez de pasar a sus compañeros inició una galopada desde el centro hasta encarar y batir al portero local.

Solana, ubicado en la banda como castigo por estar sancionado, dio más mordiente a su equipo y situó a Linares por Delgado. Suya fue la mejor acción del Zaragoza, al estrellar un tiro al poste tras el centro de Carlos Rubén. Piti, que luego sería expulsado por simular un penalti, tendría una última ocasión en el minuto 82.

HUESCA-LEVANTE B Por su parte, el Huesca recibe hoy (16.00) al Levante B con la intención de sumar un nuevo triunfo como local que cierre de forma definitiva su crisis y le sitúe en una posición más cómoda.