El Real Zaragoza ha preguntado a la Real Federación Española de Fútbol sobre la posibilidad de que los jugadores paren a beber agua a mitad de cada parte, tal y como se hizo por primera vez en el Mundial de Brasil. La normativa vigente no recoge ese derecho durante el transcurso de un encuentro, pero la SAD quiere que se tengan en cuenta, por parte de la federación y del colegiado, las altas temperaturas que tendrán que soportar los asistentes a La Romareda y los futbolistas en el terreno de juego ya que el encuentro contra el Rayo se jugará el domingo a las 16.00 horas y está previsto que los termómetros suban hasta los 33 grados.

Por su parte, Anquela se quejó ayer en Huesca de lo mismo ya que el conjunto altoaragonés se enfrenta mañana a las 16.00 horas al Lugo en El Alcoraz. El técnico dijo que jugar a esa hora «es un atentado a la salud». «Pediría que el que pone los horarios que se siente en una mesa en el centro del campo y a ver si puede estar allí dos horas», añadió.