El Zaragoza no tiene ninguna intención de traspasar a Paglialunga en este mercado de enero, pero su representante, que llegó el domingo a Zaragoza y asistió al partido, estuvo reunido ayer con el club, con García Pitarch, para saber la posición de la entidad con respecto al traspaso. El Rennes, cuya oferta superaría el millón de euros, y el Nantes quieren al centrocampista, al que le interesa en lo económico y en lo deportivo jugar en la Primera División francesa.
Otra cosa, claro, es el agradecimiento de Paglialunga al club, que apostó por él en verano, y en particular a Pitarch, que ya lo rescató del Catania la temporada pasada para llevarlo al Hércules cuando el actual director general zaragocista era presidente del club alicantino. En este sentido, el jugador, y así ha quedado claro en los diálogos entre ambas partes, no va a tensar la cuerda ni va a presionar en demasía para marcharse, aunque es obvio que le pueda apetecer el salto económico y salarial que implica la propuesta del Rennes, la que es más firme a estas alturas, aunque el Nantes siga al acecho.
La idea del Zaragoza es la de no vender a ninguno de los jugadores que considera vitales, y Paglialunga, titular fijo para Herrera cuando ha estado en condiciones y sin molestias, lo es. Sin embargo, su situación económica le obliga a estudiar cualquier oferta que venga por un futbolista y que ninguno, ni Montañés o Álvaro, por citar los casos de jugadores que más mercado pueden tener, sea intransferible.
LA SITUACIÓN El Rennes no va a mejorar mucho la oferta que ya ha hecho, ya que tiene otras alternativas en la recámara para ese puesto, aunque el intenso diálogo que han llevado el club y el agente del jugador, que fue quien hizo llegar al Zaragoza el interés de ese club francés, obliga a pensar que el asunto no está zanjado. La entidad no podría destinar todo el dinero del traspaso a reforzarse, aunque en ese caso intentar fichar a un mediocentro sería prioritario.
