El Real Zaragoza ha pedido al Udinese la cesión por una temporada del central polaco Pawel Bochniewicz y ahora mismo es el favorito para hacerse con los servicios de este zaguero zurdo, de 21 años, y que es internacional en todas las categorías inferiores, ya que en la actualidad está en la U20. Pawel ha militado en las dos últimas temporadas en el filial del Granada, en el Grupo IV de Segunda B, y tiene también alguna propuesta de la Segunda alemana, aunque la familia Pozzo prefiere que siga su carrera en la categoría de plata de España porque estima que es uno de los centrales que en un futuro puede acabar jugando en el Udinese.

La familia Pozzo controlaba el Granada hasta la temporada pasada, pero vendió sus acciones a la sociedad china Desport. Este curso ha mantenido el control sobre el filial del conjunto granadino, donde tienen un buen número de jugadores. Uno de ellos es Pawel, que llegó al Granada B cedido por el Udinese en el verano del 2015 tras militar en el Reggina Calcio de la Serie B, al que arribó tras formarse en el Wisloka Debica y en el Stal Mielec de su país, donde ha sido internacional sub-17, sub-18 y sub-20.

Se trata de un central fuerte y alto (1,94) que es una apuesta de la dirección deportiva zaragocista y que llegaría con muy bajo coste, puesto que Udinese podría hacerse cargo de una parte de su ficha. La temporada pasada disputó 20 partidos, con dos goles en el filial y esta campaña lleva 26, también con dos dianas. El Granada B ha acabado la temporada en octava posición en el Grupo IV, pero para el próximo curso ya se avecinan importantes recortes. De hecho, Lluís Planagumá, que ha sido su entrenador, ya anunció de forma oficial su salida hace solo unos días tras rescindir el contrato que le unía por dos años más al club nazarí.

Así, la de Pawel es una de las opciones más firmes que baraja el Zaragoza para reforzar una zaga que va a sufrir importantes variaciones en el próximo verano, con cambios significativos en un bloque en el que tomará las riendas en el banquillo Natxo González, actual entrenador del Reus y que siempre ha construido sus equipos a través de una gran seguridad defensiva.

CAMBIOS Y SALIDAS / De este modo, Marcelo Silva, que apunta a irse a la MLS de Estados Unidos, y Cabrera, cuyas pretensiones económicas hacen imposible su continuidad, saldrán, mientras que lo hará con total seguridad Bagnack, que acaba contrato. También tiene muy pocas opciones de seguir Feltscher, que acaba su cesión en junio, y el club deberá decidir sobre jugadores como Fran, Isaac o Casado, con contrato en vigor pero de aportación muy escasa. También tiene contrato José Enrique, pero posee una opción unilateral para romperlo por medio millón de euros.

Y ya hay operaciones muy encarriladas por parte de Lalo Arantegui. Simone Grippo, central del Vaduz suizo, está desde hace semanas apalabrado para firmar por tres temporadas, mientras que Ángel, lateral izquierdo del Reus, también tiene su destino en La Romareda. En el conjunto reusense otro objetivo desde hace meses es el lateral derecho Alberto Benito, que llegó a un acuerdo con el Mallorca del que quedaría liberado en caso de descenso balear. Si es así, su destino sería el Zaragoza.