A las puertas de un nuevo partido de Liga, ante el Leganés (21.00 horas), Zidane vive monopolizado por el Madrid del futuro, sin objetivos al alcance. «Es un final de temporada donde no vamos a ganar», reconoció el técnico. «No hablé con ningún jugador de su futuro, todavía nos quedan siete partidos. Aquí hay muchos jugadores con los que el club puede hacer caja, veremos lo que vamos a hacer», respondió a una pregunta sobre Isco, uno más de la lista de nombres a repasar en sala de prensa: Bale, Benzema, Llorente, Courtois, Vinicius o Kroos.

De casi ninguno transmitió una información relevante, más bien un denominador común, sin atisbo de reproche: «Todos los jugadores que están aquí son importantes y son muy buenos. Vamos a tener cambios, pero lo haremos al final de la temporada», reiteró en varias respuestas.

Para visitar Butarque, Zidane recupera a Carvajal y, a las bajas conocidas de Vinicius y Ramos, se ha unido la de Toni Kroos por gastroenteritis. Tampoco estará Courtois, fuera por dolencias indeterminadas: «No se encuentra bien, tiene dos o tres molestias distintas. Mejor no arriesgar», intentó aclarar el técnico del Real Madrid.