En España, en el 2016, Air Berlin fue la líder en pasajeros en el aeropuerto de Palma de Mallorca (4,77 millones). Con la reorganización traspasó sus vuelos en Baleares, Canarias, Alicante y Málaga a Niki, mientras que solo mantenía conexiones desde Barcelona a Alemania.
El año pasado, la firma recortó 1.200 empleos. Este año, la compañía comenzó a presentar importantes problemas de operativa y a sumar retrasos y cancelaciones fruto de la incertidumbre sobre su futuro. Solo en julio registró una caída de los pasajeros del 24%.
Air Berlin no ha sobrevivido al complejo mercado aéreo europeo. La cuna del low cost cuenta con grandes empresas, como Ryanair y Easyjet, y el resto de compañías o bien logran harcerse fuertes en un mercado concreto o sufren. Air Berlin tiene una gran deuda, y ha acabado por declararse insolvente.
