El secretario de organización del PSOE, José Luis Ábalos, ha asegurado este domingo que el PP y Ciudadanos están preparando un pacto para gobernar Andalucía recogiendo las "barbaridades" que les ha planteado Vox para apoyarles. El también ministro de Fomento ha negado que valga con la abstención del partido de ultraderecha, como "adrede" o por "mera ignorancia" afirmó el presidente popular, Pablo Casado, en la víspera. "O les vota Vox o no hay gobierno de derechas. Tienen que votarles y están trabajando en ello", ha sostenido.

Durante un acto de los socialistas en Palma de Mallorca, Ábalos se ha pronunciado en términos muy duros contra "unos fascistas que no quieren definirse como tal, que no quieren mostrarse como tales", en referencia al partido dirigido por Santiago Abascal. "En este país, ya sabemos, hay comunistas pero no hay fascistas, es un país muy curioso. Después de 40 años, no quedó ninguno, se autodisolvieron, se autodestruyeron", ha ironizado.

El número dos del PSOE ha vinculado directamente a Vox con el franquismo y la dictadura durante todo su discurso. Así, ha identificado al partido con "aquellos que han venido sistemáticamente negando la libertad, no solo de expresión sino incluso de pensamiento, metiendo a la gente en la cárcel y acabando con sus vidas". Y ha asegurado que su auge supone una "amenaza" que está ligada a "periodos ya conocidos anteriormente", pues "están predicando claramente el odio".

OPERACIÓN BLANQUEO

Por ello, ha criticado el "blanqueo" que está haciendo la "derecha de este país" de Vox, "tolerando el discurso fascista" de la formación. "Me preocupa la irresponsabilidad de algunos medios y de la derecha en contemporizar con esto, porque por esto ya hemos pasado históricamente. Espero que nunca se tengan que arrepentir, porque el fascismo nunca aparece tal cual, y cuando aparece tal cual ya es demasiado tarde", ha advertido.

Con todo, la culpa del auge de la extrema derecha, ha señalado, es de los secesionistas catalanes, que "están consiguiendo la reacción contraria y poniendo en cuestión la convivencia en muchos otros sitios de España". En esta línea, ha criticado su "incapacidad para gobernar" y se ha burlado del argumento de que si Catalunya fuera independiente no se producirían protestas de colectivos profesionales como las que han sucedido últimamente: "Es obvio que en todas las repúblicas del mundo esto no pasa, nadie se manifiesta, todo está resuelto".

Frente a todo ello, ha afirmado que el Gobierno va a dejar "algunas cosas resueltas" antes de convocar las elecciones generales. Así, ha anunciado que el Consejo de Ministros aprobará el próximo viernes 21 de diciembre la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 900 euros y la actualización de las pensiones con el IPC. "Vamos a mejorar bastantes cosas antes de hacer lo que tenemos que hacer y que siempre hemos defendido: que los ciudadanos tomen la palabra a través del voto", ha concluido.