EL JUICIO por el caso Mannesmann , en el que estaba previsto condenar supuestas maquinaciones secretas de los altos cargos de las empresas, para autoconcederse primas y pensiones millonarias, concluyó ayer con la absolución de los ejecutivos imputados. El fallo dio lugar a protestas en las que se gritaba en contra de "la falta de moral" de los ejecutivos y de las exigencias de reducir salarios "mientras los grandes se regalan millones", gritaban.EP