La agroindustria se ha convertido en un sector pujante en la provincia de Huesca, en la que se han invertido en los últimos cuatro años un total de 64 millones de euros, mientras que las ayudas públicas ascendieron a 14 millones de euros. Unas cifras que el consejero de Agricultura y Alimentación del Gobierno de Aragón, Gonzalo Arguilé, dió a conocer ayer durante la inauguración de la jornada empresarial "Agroalimentación: sumando valor añadido" que se celebraron en el municipio oscense de Fraga.

En toda la comunidad aragonesa, la inversión en la agroindustria se situó, entre los años 2000 y 2003, en más de 271 millones de euros con unas ayudas públicas que superaron los 60 millones de euros.

En esta misma línea, el titular de Agricultura señaló que, de los 370 proyectos que han sido aprobados en Aragón en los últimos cuatro años, 334 (el 85%) correspondieron a empresas ubicadas en el medio rural, y en este mismo periodo se crearon 1.140 puestos de trabajo como consecuencia de las inversiones puestas en marcha.

A juicio de Arguilé "la apuesta por la agroindustria mantiene una relación directa con una revitalización de la agricultura, porque hemos comprobado que aquellas comarcas aragonesas en las que se realizan más inversiones son las que registran mayor número de incorporación de jóvenes al sector agrícola".

En este sentido, cabe subrayar que la comarca del Bajo Cinca ha sido la que más inversiones ha realizado de toda la provincia altoaragonesa durante los últimos cuatro años, con casi 19 millones de euros , mientras que las ayudas públicas se situaron por encima de los cuatro millones de euros.

Además, el Bajo Cinca es la comarca aragonesa en la que más jóvenes agricultores se sumaron al sector agrario durante el último año con casi una treintena de nuevas incorporaciones.

UNA BUENA SALIDA COMERCIAL En este sentido, el consejero puso de manifiesto que "la comercialización agraria, además de suponer una salida comercial interesante de los productos agrarios aragoneses cumple el cometido de diversificar la economía rural, de vertebrar el territorio y de fijar la población en los municipios".

Finalmente, el consejero de Agricultura y Alimentación precisó que este hecho se comprueba "claramente viendo las cifras, y éste y no otro debe ser el camino a seguir por nuestros agricultores y ganaderos que deben animarse y dar el salto a la comercialización".