El presidente de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), José Luis Escrivá, denunció ayer la «mala técnica presupuestaria» empleada por el Gobierno que le lleva de forma repetida a inflar la previsión de ingresos, para poder presupuestar más gastos y, si es preciso, aplicar recortes. En su comparecencia ante la Comisión de Presupuestos del Congreso de los Diputados para valorar la ejecución presupuestaria del 2016 y los datos de déficit y deuda, Escrivá cifró en 28.000 millones de euros la sobrevaloración de los ingresos que se incorporó en el proyecto de Presupuestos del 2016, tanto en la recaudación de impuestos como en la de cotizaciones. «Hacer unos presupuestos tan alejados de la realidad y fijar unos objetivos tan irrealistas acaban produciendo desviaciones tan grandes que pone de manifiesto una técnica presupuestaria muy poco defendible», dijo Escrivá.

Según la AIReF, una parte de la desviación de los ingresos se explica porque se infravaloraron los efectos de la reforma del IRPF y del Impuesto de Sociedades que se ha aplicado en los años 2015 y 2016; por la ausencia de inflación en los últimos años; y por la «mala práctica» de inflar los ingresos de forma deliberada.