El consejero de Industria e Innovación, Arturo Aliaga, ha indicado hoy que el borrador de la nueva ley de ordenación de la actividad comercial, que introducirá cambios en las rebajas, está muy avanzado y que espera poder enviar el proyecto a las Cortes en el primer cuatrimestre del año.

En declaraciones a los medios con motivo de la reunión del Observatorio Aragonés del Comercio, el consejero ha explicado, respecto a rebajas, que el objetivo es adaptarlas a las características propias de Aragón y fijar dos periodos en coincidencia con las épocas de invierno y verano porque estimulan las ventas, pero fijadas libremente por los comerciantes.

En cuanto a la posibilidad de liberalizar horarios, Aliaga ha advertido de que pueden ocasionar "grandes desequilibrios", que no hay que "pasar por alto" la estructura social y territorial de Aragón, que en su momento ya se acordó la apertura de once domingos y festivos al año y que hay días suficientes para comprar y para que nadie quede desabastecido porque un gran centro o un pequeño comercio no abra un domingo.

Respecto a la competencia entre grandes superficies y pequeños comercios, ha apuntado que la clave está en el "equilibrio".

"Ni podemos poner puertas al campo ni podemos dejar esto a la libertad total" porque hay que proteger una estructura social y comercial, ha dicho Aliaga.

El consejero ha asegurado que en estos momentos no hay una "guerra" entre ambos formatos, que cada uno cumple su función y que deben estar preparados para el "cambio" porque "nadie tiene una foto fija" y porque quien elige es el consumidor, a quien no se puede "coartar" su libertad.

Aliaga ha destacado el esfuerzo que está haciendo el sector, que no es ajeno a la crisis, que ha perdido empleo y establecimientos, pero ha crecido un 0,4 por ciento en 2013, en la media de España, un nivel de actividad que "alienta a la esperanza".

La ley era uno de los puntos a analizar por el Observatorio, además de la revisión del Plan General para el Equipamiento Comercial de Aragón, que también está avanzado y que podría estar terminado en el primer trimestre, ha indicado Aliaga.

El plan incluye siete ejes de trabajo con programas de acción y busca ser más eficaz para la promoción del sector, al tiempo que adaptarse a los últimos cambios normativos y a la coyuntura económica actual

El Gobierno de Aragón ultima la revisión del Plan General para el Equipamiento Comercial de Aragón (PGECA) con los fines de hacerlo más eficaz para la promoción del sector y de adaptarlo tanto a la coyuntura económica actual como a los cambios normativos que se han producido en los ámbitos estatal y autonómico desde 2005.

Entonces se revisó por última vez este documento que establece las directrices para adecuar el equipamiento comercial a las necesidades de consumo y compra de los residentes en los distintos municipios y comarcas de la Comunidad Autónoma.

Entre las novedades que contiene esta revisión, que incide más en el ámbito de la promoción y fomento comercial que en el de la ordenación, se incluye un refuerzo al papel del Observatorio Aragonés del Comercio como órgano consultivo en relación con la política comercial de la Comunidad.

Este Observatorio, que quedará adscrito al Departamento competente en materia de comercio interior, está compuesto por personas con experiencia y conocimiento de la actividad comercial, entre las que hay representantes de la administración, empresarios, consumidores y sindicatos.

Entre sus funciones se encuentran las de llevar a cabo el seguimiento del plan, así como la de ser consultado preceptivamente en relación con los anteproyectos de ley de comercio interior, proyectos de reglamento, planes y bases reguladoras de las subvenciones destinadas a dinamizar este sector.

Para 2014, la dotación económica de las líneas de fomento y promoción del comercio asciende a 4,2 millones de euros, un 3 % más que en 2013.

El PGECA se desarrollará mediante un plan de acción que tendrá siete ejes de trabajo, entre ellos el apoyo a la competitividad de las pymes de comercio minorista, a las asociaciones de empresarios de comercio, al comercio en las zonas rurales, a las entidades locales para urbanismo comercial y fomento y gestión del conocimiento del sector comercial.

También para el apoyo a la introducción y desarrollo de las nuevas tecnologías y a inversiones y gastos extraordinarios sobrevenidos por fuerza mayor en el sector comercial.