El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, anunció ayer un consenso "básico e importante" con las 17 comunidades autónomas para aplicar el reparto de 47.000 millones de euros de ayudas de la Política Agraria Común (PAC) entre el 2015 y el 2020, aunque las organizaciones agrarias mostraron su decepción porque sus peticiones no han sido suficientemente atendidas. Aragón venía recibiendo 450 millones de euros anuales para pagos directos a agricultores y ganaderos (primer pilar), una cifra que se mantendrá, según confirmó ayer el consejero Modesto Lobón.

Cañete subrayó que "por primera vez en la historia" se pondrán limitaciones para que las ayudas no vayan a los "cazaprimas", ya que se exigirá una actividad agraria o ganadera significativa para poder cobrar las ayudas agrarias de la PAC. Entre los grandes acuerdos por unanimidad de los consejeros, se crearán entre 22 y 24 regiones agronómicas para que todos los sectores y territorios sigan recibiendo ayudas muy similares al periodo anterior, con un margen al alza o a la baja del 0,67%.

Las ayudas irán dirigidas a los agricultores activos y las explotaciones con actividad. No se considerarán agricultores activos aquellos cuyas ayudas directas de la PAC sean superiores en un 80% a sus ingresos agrarios. En el caso de explotaciones ganaderas vinculadas a pastos, se exigirá para considerar que tienen actividad 5 hectáreas por vaca, puntualizó el ministro.

"NO HAY TRASVASES" Lobón, por su parte, se mostró satisfecho porque Aragón "ha conseguido prácticamente los cuatro objetivos fundamentales que requería", entre los que resaltó "que no se vayan a producir trasvases de fondos entre las comunidades, de tal forma que Aragón no pierda nada". Asimismo, el Gobierno de Aragón subrayó que se da un paso hacia la profesionalidad del sector, al exigir, como mínimo, que el 20% de los ingresos agrarios no provengan de subvenciones. De esta forma, en su opinión, "se avanza en la legitimación de las ayudas".

Dentro de las ayudas acopladas, se ha acordado un apoyo sustancial a la ganadería, y de manera particular a la extensiva, que en Aragón es uno de los sectores más desfavorecidos, especialmente el ovino. También se va a apoyar a otros sectores, hasta ahora en retroceso, como la fruta de cáscara y el arroz, así como al sector de los secanos áridos.