Aston Martin ha cerrado su primera jornada en la Bolsa de Londres con una caída del 4,74% y una bajada de sus acciones de las 19 libras (16,5 euros) a las 18,1 libras (15,7 euros).

La cotización del fabricante de coches de lujo británico, que ha llegado a caer más del 7% este miércoles. Una de las principales causas que ha lastrado la valoración de la compañía ha sido la opinión de inversores y analistas sobre el lanzamiento de un fuerte plan de producción dedicado a nuevos modelos.

La compañía, que el año pasado obtuvo su primer resultado positivo, después de unos años de perdidas, ha decidido lanzar un nuevo modelo cada año hasta el 2022. Su objetivo, ahora a medio plazo, es vender cerca de 14.000 automóviles repartidos en 7.200 en el año 2019 y 9.800 para el 2020.

El presidente ejecutivo de la compañía, Andy Palmer, ha asegurado que desde el 2014 ha liderado una reestructuración de la compañía y admite que aunque aún hay "riesgo" de perdidas, "en términos de riesgo de ejecución, esto es lo que he hecho en toda mi carrera. Soy ingeniero: mitigamos el riesgo".