La concejala de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Zaragoza, Teresa Artigas, instó ayer a la DGA a solicitar la competencia de gestionar las licencias VTC para posteriormente cederlas al ayuntamiento.

Esa fue la postura mantenida por Artigas. La concejala mostró su satisfacción tras el resultado de la Conferencia Nacional de Transportes en la que el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, propuso a los gobiernos autonómicos que lo deseen acogerse a un nuevo marco normativo, que llegará en septiembre. Este marco les permitirá tener la capacidad regulatoria en materia de licencias VTC. Posteriormente, estos gobiernos podrán ceder la competencia a los ayuntamientos.

La concejala reclamó la competencia para «poder impulsar en Zaragoza una regulación similar a la de Barcelona, que incluya una autorización municipal para poder prestar el servicio», si bien aclaró que su intención es la de «adaptar el decreto de Barcelona a la realidad de Zaragoza, de acuerdo con el sector del taxi y con el ya existente de los vehículos con licencia VTC, que no tiene nada que ver con multinacionales como Uber y Cabify».

El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, José Luis Soro, se mostró interesado en acogerse a este marco pero consideró que lo primero es «solucionar el problema actual», es decir que Aragón pueda tener una proporción de una licencia de VTC por cada 30 taxis.

Actualmente, en la comunidad hay 183 licencias de vehículos VTC, a las que hay que sumar otras 90 de resoluciones judiciales y alrededor de 1.800 taxis.

Por último Artigas, quiso felicitar a los taxistas por «una lucha ejemplar y una victoria más que justa» y denunció que sin esta batalla «nos intentan imponer el neoliberalismo, basado en la explotación laboral para el enriquecimiento de multinacionales con sede en paraísos fiscales”. «Zaragoza puede estar bien orgullosa de sus taxistas, concluyó.