La industria aragonesa sufrió un bache de producción y empleo entre finales del 2015 y comienzos del 2017 porque las empresas no supieron ajustar sus precios como lo hicieron el resto de compañías industriales de España durante ese periodo de deflación. Así lo describe el catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Zaragoza, Marcos Sanso, en uno de los artículos del número 65 de la Revista de Economía Aragonesa, en el que cifra la pérdida de empleo industrial en 14.000 personas en esos años (8.000 en Zaragoza, 4.000 en Huesca y 2.000 en Teruel), según los datos recabados a través de la Encuesta de Población Activa (EPA). El artículo incide en las causas que hicieron retroceder a la industria de la comunidad y destaca que de las 29 ramas de la industria, casi la mitad se vieron afectadas por esa política de precios. «Muchas de ellas se han recuperado, pero otras nueve arrastran problemas estructurales y todavía pierden empleo», recalcó Sanso durante su intervención. Es decir, un tercio de la industria, que representa un 20% del empleo en ese sector, no se ha recuperado, por lo que el catedrático apuesta por realizar un seguimiento de los precios y fijar planes de revitalización. Los subsectores con más problemas son los relacionados con el textil, la minería, la industria del cuero y del calzado, la fabricación de muebles, las artes gráficos y productos informáticos.

Sanso, no obstante, dijo que la industria se ha recuperado del bache y contribuyó en 2017 a que Aragón fuera la región que más creciera de España.