El Banco Santander ganó 4.370 millones en 2013, un 90 % más gracias a la menor necesidad de provisiones y su presidente, Emilio Botín, confía ahora en que los resultados del grupo puedan remontar para volver a ser tan rentable como antes del estallido de la crisis.

En aquel entonces, la entidad aspiraba a ganar 10.000 millones al año, pero las turbulencias y el estallido de la burbuja inmobiliaria en España truncaron los planes del Santander, que sólo ahora se ve de nuevo capaz de recuperar la etapa de crecimiento de beneficios.

"Esperamos que en los próximos tres años nuestra rentabilidad se recupere hacia niveles previos a la crisis cumpliendo en todo momento con las nuevas normas y regulaciones en materia de capital y liquidez", ha sentenciado el presidente del Santander.

El banco, que hoy ha subido un 0,70 % en Bolsa hasta 6,43 euros, mantiene por sexto año consecutivo un dividendo de 0,60 euros, que sus accionistas podrán volver a elegir entre cobrar en efectivo o en nuevos títulos.

Según Botín, el principal objetivo del Santander en 2014 será incrementar sus resultados, lo que va a venir favorecido por "la sólida posición" de partida del grupo y la mejora de la situación económica, en especial en el caso de España, que ha dejado de ser el foco de la crisis para convertirse en un ejemplo por sus reformas.

En rueda de prensa, el banquero se ha mostrado convencido de que la recuperación de España ganará fuerza de forma gradual en 2014, cuando la economía avanzará cerca de un 1 %, en línea con las previsiones del Ejecutivo.

Pero aún así, Botín ha pedido ser "cautos" porque "las secuelas de la crisis tardarán en desaparecer" y la consolidación de la recuperación de la economía no significa volver a la etapa que España vivió en los años previos a la crisis, aunque desde la entidad se muestran dispuestos a arrimar el hombro.

En este sentido, ha insistido en el papel de los bancos para que la economía remonte, al tiempo que ha dejado claro que han sido las cajas las que han recibido ayudas por 40.000 millones y ha elogiado la "decisión valiente" del ministro de Economía, Luis de Guindos, de rescatar Bankia.

Botín, que estará al frente de la entidad "todo el tiempo que haga falta" y mientras tenga el apoyo del consejo de administración y de los accionistas, ha considerado que ya ha llegado el momento de que el Estado venda una participación de Bankia.

De hecho, si el Gobierno así lo decide, se ha ofrecido a ayudar a colocar acciones de la entidad nacionalizada entre inversores.

En cuanto a Latinoamérica, Botín ha insistido en la importancia de esta región en la que el banco ganó 3.257 millones (el 23,6 % menos), y de ellos, 1.577 millones los obtuvo en Brasil, el 27,9 % menos, y otros 713 millones, en México, el 29,3 % menos.

No obstante, el banquero se muestra optimista sobre el futuro de todos estos países, incluido Argentina, pues a pesar del "episodio de inestabilidad cambiaria" su economía muestra varias fortalezas.

Además, ha asegurado que los resultados pueden mejorar en muchas áreas geográficas, por ejemplo, Brasil; Estados Unidos, donde les gustaría comprar alguna entidad más; Reino Unido, en el que ganó 1.149 millones, un 11,1 % más; o España.

En este último caso, el Santander obtuvo un beneficio neto de 478 millones, un 45 % menos, con un recorte del 3 % en los depósitos y del 8 % en los créditos. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el grupo excluye los 653 millones que perdió su unidad inmobiliaria.

En todo el grupo, el crédito a la clientela cayó el 7 % en 2013, hasta los 668.856 millones, con una morosidad del 5,64 %, que en España se situó en el 7,49 %, en parte por la reclasificación de las hipotecas con moratoria.