Una "carta a los reyes magos" con dos deseos: independencia y privatización. El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha pedido este jueves al nuevo Gobierno que se forme tras las elecciones generales que "se comporte de forma tan exquisita como se han comportado los Ejecutivos (de Rajoy y Sánchez) hasta ahora" con la entidad, sin "injerencias políticas" y respetando su gestión profesional "como mejor forma de generar valor y devolver las ayudas". Y al mismo tiempo, que tenga la "idea clara" de continuar con su venta.

La devolución del banco nacionalizado al sector privado, ha argumentado en un encuentro con periodistas previo a su junta de accionistas, es "bueno para los españoles", porque es positivo "evitar cualquier tentación de utilizar Bankia con injerencias políticas o como banca pública". Un planteamiento en el que está convencido de contar con el apoyo de la mayoría del futuro parlamento: "Creo que los grandes partidos están de acuerdo conmigo".

El ejecutivo, eso sí, ha admitido que ahora "no es buen momento" para seguir vendiendo paquetes accionariales de la entidad en el mercado, después de las dos ventas parciales en el 2014 y el 2017, por la fuerte caída de los bancos en bolsa. Pero se ha mostrado convencido de que la política monetaria cambiará "en algún momento" y la cotización de los bancos lo reflejará con subidas. En este sentido, ha admitido que la reciente decisión del Banco Central Europeo (BCE) de retrasar las subidas de tipos "penaliza" a la entidad, pero ha confirmado sus objetivos de ganar 1.300 millones en el 2020 y de repartir 2.500 millones a los accionistas entre el 2018 y el 2020 (de momento va a abonar 357 millones con cargo a los resultados del año pasado): "Queda mucho partido".

MESA VACÍA

El banquero también ha negado que busque la privatización de la entidad para lanzarla a alguna fusión, así como ha desmentido haber recibido "ninguna indicación" del Gobierno para que protagonice nuevas operaciones, tras la absorción de la también pública BMN en el 2017. "Como dije el año pasado, no hay fusiones ni encima de la mesa ni sobrevolando la mesa", ha sostenido tras recordar que el plan estratégico de Bankia para el periodo 2018-2020 pasa por mantener su mismo tamaño.

Eso sí, ha admitido que el entorno de bajos tipos de interés "genera una fuerte tensión en ingresos y rentabilidad" en el sector, lo que "incentiva" procesos de consolidación para ahorrar costes. De momento se ha anunciado la unión de Liberbank y Unicaja y los expertos creen que hay espacio para más operaciones. Pero Goirigolzarri no las espera a corto plazo: "Si los tipos bajos durante dos o tres años más, los procesos de consolidación se van a ver mucho más animados".

El ejecutivo también ha restado gravedad a la desaceleración de la economía española: está en línea con lo esperado hace cinco o seis meses y el crecimiento rondará el 2% este año y el próximo. De hecho, el banco ha contratado por primera vez desde que nació en el 2010 a 200 personas (50 con perfil tecnológico y 150 para la red comercial) y prevé que este año dejen de caer su cartera de crédito, sus ingresos y sus beneficios. El consejero delegado, José Sevilla, también ha sostenido que no prevé que la nueva ley de contratos hipotecarios suponga un gran cambio en el precio de estos créditos, pese a las advertencias del Banco de España.