La Comisión Europea ha abierto un expediente al grupo automovilístico francés Peugeot por restricciones a la libre competencia y está investigando denuncias similares contra las compañías alemanas Audi y BMW, según anunció el jueves el portavoz del comisario de Competencia, Mario Monti.

Peugeot, según ha podido verificar el Ejecutivo comunitario, aplica unas bonificaciones a sus distribuidores para que todos los coches que vendan se matriculen en su propio país con el objetivo de mantener precios distintos para un mismo modelo de automóvil en los diferentes países de la Unión Europea (UE). Esta práctica ilegal impide a los ciudadanos comprar el automóvil en el país de la UE donde sea más barato antes de impuestos.

OTRAS MARCAS INVESTIGADAS La Comisión Europea está investigando a Audi por impedir el intercambio, sin autorización previa, de suministros transfronterizos entre los concesionarios, según las denuncias presentadas por concesionarios de España, Italia y Alemania, explicó el portavoz de Monti.

En el caso de BMW, el Ejecutivo comunitario investiga las denuncias de concesionarios alemanes a los que se les impide vender también coches de otras marcas, en contra de lo dispuesto en la nueva normativa europea sobre distribución de automóviles.

El informe semestral sobre los precios de los coches en la UE reveló que en mayo persistían, en numerosos casos, diferencias de precios (antes de impuestos) superiores al 20% para el mismo modelo entre el país más barato y el más caro.