La Caja de la Inmaculada (CAI) ha obtenido un beneficio neto de 11,8 millones de euros en el primer trimestre del 2004, lo que supone un incremento del 5,7% respecto al alcanzado en el mismo periodo del pasado año. El avance de los resultados hasta marzo fue facilitado ayer por el presidente de la entidad financiera, Fernando Gil, y por su director general, Luis Calvera, durante la primera Asamblea General Ordinaria del 2004 de la caja, celebrada en Zaragoza, y en la que también expusieron lo más destacado de su actividad financiera y social en el 2003.

De acuerdo con los datos facilitados por los responsables de la entidad de ahorro, el volumen total de negocio administrado por Caja Inmaculada a finales de marzo alcanzaba un importe de 12.567 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 11,50% respecto al mismo periodo del 2003 y 1.297 millones de euros de incremento absoluto. En este sentido, los recursos de clientes, que comprenden tanto los depósitos tradicionales como los fondos de inversión y de pensiones, presentaron un aumento del 11,61%. Este incremento de la actividad situaba el activo total del balance a 31 de marzo en 6.056 millones de euros, con una variación interanual del 11,53%.

Las operaciones de financiación formalizadas durante el primer trimestre del 2004 sumaron 871 millones de euros, lo que supone un incremento del 17,78% respecto a la cifra conseguida en el primer trimestre del pasado ejercicio, cuando el importe fue de 739 millones de euros. Del mismo modo, la inversión crediticia de la caja en los tres primeros meses del año alcanzó un total de 4.710 millones de euros, lo que representa un crecimiento anual del 10,8%. Este área presenta una amplia diversificación por sectores y finalidades, aunque destacan de forma especial los créditos otorgados a clientes para construcción y compra de vivienda.

PORCENTAJE DE MOROSIDAD En el primer trimestre del año, la ratio de morosidad del crédito en Caja Inmaculada se situó en el 0,37%, una de las más bajas del sector financiero español. Asimismo, la cobertura de los riesgos dudosos se colocó en el 623,57%, es decir, los fondos de insolvencias cubren más de seis veces la cifra de dudosos, una de las mejores ratios que se pueden encontrar en la banca europea.

Desde la entidad de ahorro también se hizo hincapié en que, desde marzo del pasado año, el Banco Central Europeo (BCE) había bajado medio punto el tipo de intervención, un hecho que afirman ha repercutido en la cuenta de resultados de la CAI. No obstante, a pesar del nivel mínimo de tipos de interés existentes, Caja Inmaculada ha logrado en el primer trimestre del 2004 un incremento interanual del 1,49% en su margen de intermediación.