CaixaBank se ha estrenado este 2021 en los mercados mayoristas con la emisión de su segundo bono verde por importe de 1.000 millones de euros, después del que ya colocó en noviembre por esta misma cuantía, y lo ha hecho con una demanda que ha superado los 3.700 millones. La emisión, en formato sénior no preferente, cuenta con un vencimiento de ocho años y una opción de amortización anticipada en el último año por parte del emisor, según ha informado CaixaBank, que ha precisado que se trata del plazo más largo elegido por un banco español para una emisión senior no preferente en el mercado euro.

La colocación ha salido al mercado a un precio inicial de 115 puntos sobre el 'midswap', el índice de referencia para este tipo de operaciones, pero dada la elevada demanda recibida finalmente el precio se ha reducido hasta los 90 puntos. El cupón ha quedado establecido en el 0,5%. Según CaixaBank, se trata de la primera emisión senior que se realiza este año en España, así como la primera senior no preferente en formato verde del año que se lleva a cabo en Europa.

Los bancos colocadores de la emisión han sido ABN Amro, Goldman Sachs, Natixis y UBS Investment Bank, además de la propia CaixaBank. Un 67 % de los bonos han sido adjudicados a inversores reconocidos en el mercado como inversores socialmente responsables (SRI) y, entre estos, el 57 % cuenta con el mayor reconocimiento en inversión responsable (Dark SRI).

"Además de la elevada demanda, destaca la gran capilaridad de libro, con más de 200 inversores institucionales y la fuerte participación de inversores extranjeros, que representaron alrededor del 90 % de la demanda, con el 76 % de la emisión colocada entre fondos de inversión y compañías de seguros", destaca el banco catalán.

A través de esta segunda emisión, la entidad canalizará fondos para financiar proyectos que contribuyan a la sostenibilidad medioambiental, como la reducción de gases de efecto invernadero, la prevención de la contaminación y la adaptación al cambio climático

CaixaBank emitió el pasado mes de noviembre su primer bono verde por importe de 1.000 millones de euros para financiar proyectos de energía renovable y edificios enérgicamente eficientes, con una demanda que superó los 4.500 millones.

En esa ocasión, el bono se emitió con un plazo de seis años, también con opción de amortización anticipada, y a un precio de 85 puntos básicos sobre el 'midswap'.