La planta de Caladero en la Plataforma Logística de Zaragoza (Plaza) se verá reforzada tras conocerse ayer que la compañía, proveedora de pescados y mariscos de Mercadona, va a cerrar su planta de Cádiz y trasladar su actividad a la capital aragonesa.

Fuentes de la empresa consultadas por este diario no concretaron la repercusión que esta decisión estratégica puede tener en la factoría aragonesa, que en estos momentos da empleo a unas 490 personas. Lo que parece claro es que Caladero reforzará su sede central de Plaza, donde aglutina el 80% de su actividad.

La empresa señaló ayer que esta decisión se enmarca dentro de un proceso de reorganización de la compañía «para reforzar su eficiencia y competitividad» y, paralelamente, «generar sinergias en su actividad logística».

El anuncio fue comunicado a los trabajadores de la factoría gaditana, a los que se les ofreció la posibilidad de optar a mantener su empleo en Zaragoza o incorporarse a la plantilla de Mercadona en la provincia andaluza.

Según explicó la compañía, «se está buscando las mejores soluciones para la plantilla y agradece la colaboración y el esfuerzo realizado por el comité de empresa». En estos momentos la plantilla de la factoría andaluza ronda los 80 trabajadores.

A PARTIR DE OCTUBRE

El traslado se hará efectivo a partir del próximo mes de octubre, según detalla la empresa, lo que elevará la capacidad productiva de Caladero en Zaragoza, donde ya cuenta con un total de 17 líneas diferentes de producción. En las instalaciones de Cádiz, el proveedor de Mercadona tiene en la actualidad seis líneas, fundamentalmente mejillones y langostinos. En concreto, desde Cádiz salían casi 23.000 bandejas diarias de langostino, mejillón y sardina, las tres variedades que se trabajaban en la planta gaditana.

El año pasado la empresa centró sus esfuerzos en «asentar y garantizar las nuevas implantaciones de producto, como por ejemplo el atún Calidad Sashimi, y en reforzar el conocimiento de nuevos orígenes y especies de materias primas para incorporar mejoras constantes», apunta.

OCHO AÑOS DESPUÉS

Caladero inició su actividad en Cádiz en el tercer trimestre de 2009, con la apertura de su planta en el recinto interior de la Zona Franca. Actualmente, sus instalaciones cuentan con seis líneas, en las que se producen fundamentalmente langostino y mejillón.

Las instalaciones de Caladero en la comunidad andaluza disponen de un total de 8.000 metros cuadrados de planta en 10.000 metros cuadrados de parcela. Está especializada en cocción, fileteado y empanados y cuenta con dos líneas de producción específicas.