El gobernador del Banco de España, Jaime Caruana, pronosticó ayer que la economía española crecerá en torno al 2,6% en el conjunto del 2004 (frente al 2,8% estimado por el Gobierno). En el 2005 --añadió--, "lo más probable" es que se mantenga una senda de crecimiento estable, "no muy alejada de la actual", de modo que la tasa estará "más cerca del 2,6%" que del 3% pronosticado por el Ejecutivo.

Caruana compareció ayer ante la Comisión de Presupuestos del Senado y allí afirmó que un crecimiento inferior a lo previsto en el 2005 no debe impedir el superávit del 0,1% del producto interior bruto (PIB) previsto por el Gobierno. El gobernador reclamó, incluso, un excedente mayor para compensar un consumo recalentado con bajos tipos de interés.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) confirmó ayer que el crecimiento del producto interior bruto (PIB) en el tercer trimestre del año fue del 2,6% respecto al mismo periodo del año anterior. Esta tasa --anticipada hace semanas por el Banco de España y por el propio INE-- es la misma que la registrada en el segundo trimestre y una décima inferior a la del primero (el 2,7%).

El secretario de Estado de Economía, David Vegara, que también compareció ayer en el Senado, valoró estos datos como "francamente positivos", no sólo porque la economía avanza "a una tasa notable", sino por la composición del crecimiento: la inversión en bienes de equipo creció cerca del 10% en el tercer trimestre, más del doble que en el trimestre anterior (el 4,3%) y la tasa más alta en cinco años. "La inversión se ha convertido en motor de un crecimiento económico más sano", destacó el Consejo Superior de Cámaras de Comercio.

Tras conocer el dato del INE, Vegara confirmó ayer que el Ejecutivo rebajará sus estimaciones para el 2005 "en alguna décima". El Gobierno esperará a redactar el programa de estabilidad 2004-2008, en diciembre, para afinar sus nuevas previsiones, condicionadas por el petróleo.

EMPLEO Y SECTOR EXTERIOR Lo más positivo de los datos de Contabilidad Nacional conocidos ayer es el fuerte avance de la inversión y del empleo, que se ha acelerado una décima (el 2,1%). En el último año, pues, se han creado 332.000 empleos equivalentes a tiempo completo. La industria aún destruye empleo (24.300 puestos menos en los 12 últimos meses).

Lo peor de la estadística publicada ayer por el INE es la fuerte contribución negativa del sector exterior, que ha restado dos puntos al crecimiento de la demanda interna, del 4,6%, debido a que las importaciones crecen más del doble que las exportaciones (el 9,6% frente al 4,2%).

El gobernador del Banco de España ve en estos datos "síntomas de pérdida de competitividad" de la economía española, así como un deterioro del sector turístico. Vegara, más optimista, cree que una parte de las importaciones tiene que ver con la compra de bienes de equipo precisa para recuperar inversión.