La Comisión Europea ha abierto una investigación para evaluar si los acuerdos entre los proveedores de sistemas de reservas de billetes de aviación Amadeus y Sabre, por un lado, y las líneas aéreas y agencias de viaje, por otro, pueden restringir la competencia e infringir la legislación de la Unión Europea (UE) en materia de defensa de la competencia. La acción de la plataforma de reservas registró una caída del 1,8% en bolsa tras conocerse la noticia.

La comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, recalcó que la liberalización del mercado aéreo de la UE hace más de 25 años ha comportado beneficios significativos para los ciudadanos europeos, incluidas más opciones de elección y precios de billetes más bajos para argumentar que la investigación sobre Amadeus y Sabre se centra en «posibles restricciones a la competencia en el mercado de los servicios de distribución de billetes de avión».

Las pesquisas intentan esclarecer si estas restricciones pueden crear barreras a la innovación e incrementar los costes de distribución de los billetes «y que esto finalmente se traduzca en un aumento del precio que pagan los viajeros».

Amadeus, compañía basada en España, y Sabre, con sede en Estados Unidos, son líderes mundiales en los sistemas informatizados de reservas, también conocidos como sistemas globales de distribución. Estos sistemas agregan la información sobre los horarios de los vuelos, la disponibilidad de plazas y el precio de los billetes de varias líneas aéreas y permite así a los agentes de viajes y las compañías de gestión de viajes comparar los servicios de las líneas aéreas y emitir los billetes en nombre de los viajeros.

La Comisión investigará si alguno de los puntos de los acuerdos de Amadeus y Sabre puede restringir la capacidad de las líneas aéreas y las agencias de utilizar proveedores alternativos, dificultar la entrada en el mercado de otros actores y, en definitiva, crear sobrecostes al precio de los billetes.