El comité de la planta de
Seb-Moulinex en Barbastro presentó ayer su propuesta de indemnizaciones económicas a los representantes de la dirección del grupo en España durante el encuentro que mantuvieron para negociar las condiciones de cierre de la factoría oscense, previsto para antes del 30 de junio. Los representantes de los trabajadores solicitan 63 días por año trabajado más un fijo para todos los empleados "por el perjuicio causado a la plantilla con los distintos expedientes de regulación de empleo que se han llevado a cabo en los últimos años", señalaron fuentes sindicales.
José Carlos Casañal, responsable del área de Industria de OSTA (sindicato mayoritario en la planta de Barbastro) explicó que el comité había solicitado una indemnización de 45 días por año trabajado "por entender que el despido es improcedente", a los que suman 18 días más, basados en la antigüedad media de la plantilla "y como compensación al daño moral que han sufrido". La propuesta planteada de los sindicatos --a la que responderá la multinacional el próximo lunes-- casi duplica la oferta de 35 días realizada por la dirección, que fue calificada por la plantilla como "indignante".
El comité también reclama una indemnización económica fija para cada uno de los 271 trabajadores, dejando el cálculo definitivo de la misma en manos de la empresa. Casañal comentó que el objetivo de este fijo es triple. Por un lado se busca que se resarzan los seis meses de paro que los trabajadores han consumido con motivo de los distintas regulaciones de empleo que se han aplicado en los últimos tres años, "un esfuerzo que realizó la plantilla con el fin de asegurar el mantenimiento de la planta y que, después de todo, no ha servido para nada", manifestó el representante de OSTA.
De cara al cobro del desempleo, exigen que en esa cuantía fija esté incluida también una compensación por la diferencia entre las bases de cotización del 2001 --a las que están obligados a acogerse-- y las del 2004. Asimismo, y debido al incumplimiento de los acuerdos para el desarrollo industrial de la planta oscense, que garantizaban que no habría despidos hasta febrero del 2005, los representantes de los trabajadores reclaman el pago de los salarios medios hasta esa fecha.
"Se trata de una factura sin IVA, pero que está más que justificada. La empresa no se puede ir de Barbastro de una forma tan inhumana", comentó Casañal, quien incidió en que la prioridad seguía siendo el empleo. En este sentido, los responsables de Seb Ibérica reiteraron el interés de una tercera empresa en la compra parcial de las instalaciones de Barbastro, aunque aseguraron que la línea proyectada sólo requeriría entre 15 y 20 trabajadores.
