La factoría que Opel España tiene en el municipio zaragozano de Figueruelas abordará en breve la negociación de su XI Convenio Colectivo. El pleno del comité de empresa aprobó ayer por mayoría --con la excepción de los representantes de CGT-- la plataforma unificada que presentará hoy a la compañía y que servirá de base para las negociaciones del nuevo documento, que esperan puedan comenzar a principios de febrero.

Según informaron fuentes del comité de empresa, la propuesta sindical plantea un convenio con una vigencia de dos años, con una subida salarial del IPC previsto más un punto y una reducción de la jornada actual en dos días, uno de ellos, para incrementar las vacaciones colectivas. El documento incluye también diferentes demandas relativas a los ascensos y categorías y de mejoras sociales, así como de consolidación de empleo y de inversiones.

El secretario de la sección sindical de UGT-Aragón en Opel España, Fernando Bolea, señaló que las reivindicaciones recogidas en la plataforma eran muy similares a las planteadas en la anterior negociación, aunque destacó que, en la actualidad, la factoría se encontraba en mejores condiciones. "La negociación de este convenio se afronta desde una situación más favorable que la que había en el 2001, cuando se estudió el anterior. Entonces partíamos con un exceso de capacidad, porque sólo fabricábamos el Corsa , que terminó con la presentación de un expediente de regulación de empleo temporal", apuntó Bolea.

En este sentido, el representante sindical señaló que, aunque la factoría había atravesado tres o cuatro años de dificultades, "lo peor" se había superado, en especial, a raíz de la firma del plan industrial --en febrero del 2002-- y de las inversiones derivadas de la adjudicación de la fabricación del Meriva . Por todo ello, el presidente del comité, Juan Carlos Sánchez, manifestó que esperaba que fuera "más fácil" llegar a un acuerdo con la dirección de la empresa. No obstante, según informó Sánchez a Efe, la negociación --que se podría alargar hasta mayo o junio-- se preveía "dura", debido a la situación que atraviesa el sector del automóvil.

Con todo, Sánchez añadió que el comité planteará sus reivindicaciones con independencia de que la marca "no esté tan bien como hace diez o quince años". No obstante, recordó que la planta de Figueruelas "no es un islote" y "no se puede desligar" de la división europea de General Motors, que finalizó el pasado año con unas pérdidas 230 millones de euros, aunque esperaba obtener beneficios en este ejercicio.

Asimismo, Bolea rechazó la posibilidad de que se introdujeran más medidas de flexibilidad laboral en el nuevo convenio. "Con la incorporación de la jornada irregular tras la firma del plan industrial, la compañía cuenta en la actualidad con mecanismos suficientes para poder ajustar la producción".