La compra on line en el sector de alimentación y de gran consumo sigue siendo casi testimonial en España, aunque las cadenas de distribución siguen apostando por su expansión futura. Según datos de la consultora Nielsen, en la actualidad las ventas a través de internet suponen menos del 1% de la facturación del conjunto del mercado de gran consumo. Apenas dos de cada diez consumidores confiesan que hacen sus compras a través de internet. «La principal barrera para hacer un pedido on line de productos de gran consumo, en un 52% de las respuestas es no poder ver y tocar físicamente el producto, una actitud muy asociada a los productos frescos, tan presentes en la cesta de la compra de los españoles», explican los expertos de Nielsen. Según la responsable del estudio de Nielsen, Ángeles Zabaleta, «la mitad de los consumidores no tiene claro que vaya a realizar a corto o medio plazo su compra por internet. Se avanzará cuando se destierren mitos en la mente del consumidor y la experiencia de compra sea satisfactoria, o al menos igual a la de la tienda física».
El 82% de los compradores que llenaron su despensa por internet utilizaron el ordenador, según el informe de Nielsen presentado con motivo de la celebración del salón Alimentaria, que se celebra en Barcelona la semana próxima. En cambio, el móvil fue empleado en una de cada tres veces que se compró y la tableta, por un 21% de los compradores. En estos casos, cuando se opta por uno de estos dos dispositivos, dos de cada tres hacen su pedido directamente a través de las aplicaciones de las cadenas.
El perfil del comprador abierto a usar internet es una mujer de 35 a 49 años, que realiza una compra de abastecimiento regular de la despensa familiar, es decir, productos de carga y también de ciclos de compra espaciados. En concreto, son habituales productos que pesan como detergente (55%), champú (53%) o leche y derivados lácteos (47%).
