El conflicto laboral que afecta a Android amenaza con paros a lo largo de los próximos días. Esa es el menos la sensación de los sindicatos tras la reunión que mantuvieron ayer con la dirección de la compañía. Su intención es inaplicar el convenio para reducir los salarios en la empresa.

El encuentro de ayer concluyó sin avances y con la negativa de Android de abandonar la idea de inaplicar el convenio para negociar el nuevo pacto laboral sin esa amenaza. La empresa -dedicada al montaje de puertas, salpicaderos y suspensiones y que da trabajo a más de 400 personas en Figueruelas- quiere reducir los sueldos alrededor del 7,5% para poder optar a nuevos contratos con Opel. El comité se reunirá el miércoles para decidir qué medidas adopta. En esa tesitura están también otras auxiliares tras la integración de Opel en PSA.