Los contratistas de obras públicas han puesto el grito en el cielo por el alza del precio del acero y sus repercusiones en la cuenta de resultados y han exigido a la Administración que aumente también los precios de los contratos ya pactados para hacer frente a las "importantes e imprevisibles subidas del material siderúrgico utilizado en la construcción".

La Cámara de Contratistas de Obras de Cataluña (CCOC) afirmó, mediante un comunicado, que las empresas públicas como GISA, Incasol, Adigsa "y el resto de organismos públicos y privados de contratación de obras tienen una especial responsabilidad en la recuperación del equilibrio económico de los contratos".

El acero se ha encarecido más del 50% en algunos casos, desde octubre. Según la CCOC, los productos siderúrgicos suponen casi un 12% de los costes en la edificación y un 18% en la obra civil, por lo que un incremento del 50% en algunos de sus principales componentes tiene un efecto fuerte sobre el coste final de la obra.

Los contratistas dicen que "se ha roto el equilibrio contractual pactado". Por ello, reclaman la revisión de los contratos, caso por caso. Y advierten: "De no ser posible, la Cámara recomendará a las empresas que acudan a los tribunales en demanda de justicia".