Las Cortes de Aragón aprobaron ayer con un amplio consenso la ley de venta local de productos agroalimentarios de forma directa y en canales cortos de comercialización. El principal objetivo de la norma, con cuya aprobación se mostraron satisfechos los portavoces de todos los grupos parlamentarios, es mejorar los resultados económicos de los titulares de explotaciones agrarias a través de una mayor participación en la comercialización de sus productos, primarios o transformados, con el consiguiente incremento de valor añadido.

Esta venta directa les permitirá, según la exposición de motivos de la ley, diversificar sus fuentes de ingresos, dando visibilidad al sector agrario y contribuyendo a dinamizar el medio rural. Pero también facilitará y fomentará el acceso a productos agroalimentarios con un valor añadido de proximidad y de información sobre su procedencia, coste real, sistemas de producción y condiciones de sostenibilidad, aspectos sobre cuyo conocimiento el interés de los consumidores ha aumentado notoriamente.

El sindicato UAGA mostró su satisfacción por la aprobación de la nueva normativa e insistió en su apuesta por la venta directa como forma de incrementar la renta de las pequeñas explotaciones. La organización ha presentado enmiendas al anteproyecto de ley y ha participado con propuestas en los talleres convocados por el Gobierno de Aragón con el objetivo de «facilitar este tipo de comercialización en la agricultura familiar y profesional, que en Francia, por ejemplo, se realiza por el 21% de las explotaciones (uno de cada cinco productores)».

La ley establece las condiciones y requisitos específicos que deben reunir tanto los productores como los establecimientos locales que participen en las modalidades de venta local. Y para facilitar un mejor conocimiento por parte de los consumidores de los puntos de venta local, éstos podrán disponer de un distintivo único que permita su identificación. Todos los portavoces coincidieron ayer en señalar que se trata de una buena ley.