Algunas facturas pendientes de pago han empezado a salir del cajón. El secretario de Estado de Hacienda, Miguel Angel Fernández Ordóñez, anunció ayer que el déficit público del Estado no será del 0,4% del producto interior bruto (PIB) previsto por el Gobierno del PP sino que será de "al menos" el 0,9% del PIB. Todo dependerá de "las partidas que no se asumieron en el pasado", cuyo volumen total aún no ha cifrado el nuevo equipo socialista, según explicó ayer Fernández Ordóñez.

De momento, está claro que el Gobierno va a asumir este mismo año la "deuda histórica" con Andalucía, que el exministro de Hacienda del PP, Cristóbal Montoro, cifró en 2.330 millones de euros (387.680 millones de pesetas), casi el 0,4% del PIB. El presidente andaluz, Manuel Chaves, ha logrado el compromiso de pago del nuevo Gobierno.

Además, en febrero pasado, la Comisión Europea obligó al Gobierno a integrar dentro de sus cuentas el déficit de RTVE (no la deuda), estimado en algo más de 600 millones, en torno al 0,1% del PIB.

Estas dos partidas añadirán 0,5 puntos de PIB al déficit público que se sumarán al 0,4% previsto. "Este año, por tanto, se cerrará con un déficit de, al menos, el 0,9% por el reconocimiento de déficits que no se hicieron en su momento por una decisión política para lucir menos déficit", subrayó el secretario de Estado.

Como se prevé que la Seguridad Social acabe el año con un superávit del 0,4%, las administraciones no cerrarán con el equilibrio anunciado por el PP, sino con un déficit de, al menos, el 0,5% del PIB. A éste se sumará el desfase que aporten las autonomías, algunas de las cuales han encontrado déficits ocultos (1.177 millones en el caso catalán).

Fernández Ordóñez dijo que el Gobierno tendrá que hacer un esfuerzo para explicar a la gente que este nuevo déficit se debe a obligaciones incumplidas por el PP. También habrá que hacer entender la diferencia entre déficit "excepcional" (que sólo se afecta a un ejercicio, como la deuda andaluza) y "recurrente". "Desde el punto de vista de lo que me interesa, que es la estabilidad presupuestaria en el medio plazo, no me preocupa el déficit excepcional", dijo el secretario de Estado.

El Gobierno sólo ha emprendido una labor intensiva de la Intervención General del Estado (IGAE) en el Ministerio de Fomento --"a petición de la ministra" para aclarar los compromisos de gasto legados por el exministro Alvarez-Cascos.