La Denominación de Origen Cariñena está viviendo una segunda juventud, no sólo por la modernización que están emprendiendo sus bodegas, sino por la efervescencia de nuevos proyectos. Ayer, Bodegas Añadas presentó sus nuevas instalaciones, en las que se han invertido 9 millones de euros. Pero antes de finales de año nacerán tres nuevas bodegas.

En Longares, Bodegas Lalaguna García. S.A. ha invertido dos millones de euros en una fábrica de embotellado y crianza. Un proyecto, que arrancó hace 15 días con el inicio de las obras, y que dará empleo directo a 10 personas. A esta iniciativa, hay que sumar la que están llevando a cabo Bodegas Esteban Martín y Bodegas Victoria, en Cariñena. Entre ambas, la inversión suma un millón de euros y el número de empleos nuevos alcanzará los 20.

En este contexto, ayer la protagonista fue Bodegas Añadas que estrenó sus nuevas instalaciones. Un proyecto que han puesto en marcha en Cariñena dos familias aragonesas ajenas hasta el momento al mundo del vino. El objetivo no es otro que "elaborar los mejores vinos de calidad, a través de las mejores uvas", según destacaron sus responsables, Rafael Díaz y Angel Lázaro, cuya apuesta nace bajo la marca Care .

La aventura en el mundo de los caldos de estas dos familias, dedicadas al textil y al equipamiento comercial, comenzó en el año 2000 y ayer cristalizó tras realizar una inversión de nueve millones de euros en estas bodegas, que ocupan 4.400 metros cuadrados, y a cuyo cargo se encuentra el director técnico, Jesús Navascués. El equipo lo completan otras 12 personas, todos ellos con "gran experiencia" en el sector, según precisó Díaz, aunque la plantillla supera las 25 personas en temporadas con puntas de trabajo.

Bodegas Añadas cuenta con dos fincas, que engloban 100 hectáreas. De ellas, 70 ya se encuentran plantadas y el resto de la plantación se completará el próximo año. Además, la densidad alcanza las 4.000 cepas por hectárea.

Sus instalaciones disponen de sala de elaboración, de ensayos, de mezclas y estabilización, así como naves para la crianza en barricas (hasta 3.000 barricas) y en botella (almacena hasta 700.000 botellas) y una sala de embotellado. Unas instalaciones que pudo recorrer ayer el presidente del Gobierno aragonés, Marcelino Iglesias, acompañado por el alcalde de Cariñena, Alejandro Bribián; y presidente del CRDO Cariñena, Santiago Begué, entre otros.

Según Díaz, estas bodegas están pensadas para que resulten "cómodas para trabajar", y en las que la uva y el vino "se sientan a gusto".

EXITO EN EL MERCADO Navascués explicó que la primera añada (2001) del vino Care contó con una producción superior a las 49.000 botellas --la mayor parte de 0,75--. En la actualidad se ha comenzado el embotellado del Care 2002, que saldrá al mercado el próximo mes de septiembre, con casi 90.000 botellas. Además, la cosecha del 2004 contará con un vino tinto joven, al que se les unirá un blanco y un rosado, que se quiere comercializar antes de Navidades, precisó el director técnico.

En cuanto a la comercialización de estos caldos, Navascués indicó que han llegado a América, Canadá, Holanda, Reino Unido, Francia e Italia. En el ámbito nacional, su venta se ha centrado en Barcelona, Oviedo, Madrid, Valencia, Ibiza y en Aragón. En definitiva, "estamos muy contentos con el Care", que se comercializa a partes iguales en el mercado nacional y en el extranjero.

El presidente del Gobierno aragonés, subrayó el esfuerzo del sector por modernizarse y la "preocupación y obsesión" de los viticultores por la calidad. Actitud que alabó, puesto que "este es el camino" para potenciar la Denominación de Origen, cuya producción ronda los 60 millones de botellas.