En el 2008, el grupo informático EDS anunciaba a bombo y platillo que duplicaría su plantilla de Zaragoza en dos años, hasta casi 1.000 empleos. El ambicioso plan de crecimiento de la empresa, arraigada en Aragón desde hacía 20 años gracias a GM, quedó truncado cuando fue comprada en el 2009 por HP. Desde entonces, la actividad ha ido en declive, sobre todo en outsourcing (servicios tecnológicos). A finales del 2012, HP concentró su plantilla en Plaza y dejó huérfano el centro que ocupaba en la avenida Cataluña. Los conflictos laborales han sido continuos, preludio de un ERE que hace ya tiempo era esperado por los sindicatos.