¿Vivir para trabajar o trabajar para vivir? Quizá, la mayoría de empleados optaría por la segunda pero la realidad no siempre se ajusta al deseo propio.
Para ayudar a las empresas a implantar medidas para que sus trabajadores puedan conciliar la vida laboral y la personal nació a principios del mes de mayo la start up zaragozana Oh my work!, liderada por el asesor laboral Daniel Blas y el empresario Enrique Acosta.
Estos emprendedores aragoneses han diseñado un test on line y gratuito para hacer reflexionar a las personas sobre si concilian o no en sus empresas y, en el caso de que lo hagan, cómo se lleva a cabo esa conciliación. «El tema de la conciliación nos parece muy importante tanto a Daniel como a mí, ya que hemos visto los beneficios que tiene dentro de la empresa».
Así, este desenfadado test es una puerta de entrada para conocer el curso de formación sobre conciliación que comercializan para empresas. «Este tiene un contenido profundo pero utiliza un lenguaje que se acerca a las personas», explica Acosta. Por un lado, la formación incluye contenido referente a la normativa y, por otro lado, trata temas como la productividad, la creatividad, la felicidad en el trabajo y medidas necesarias para aprender a organizarse mejor. «Cuando consigues darte cuenta de todos estos aspectos, es cuando puedes empezar a cambiar», señala Acosta.
PROYECTO SOCIAL
Ambos se conocieron hace un par de años, en un máster para emprendedores. Congeniaron tan bien que decidieron aplicar los conocimientos adquiridos y poner en marcha un proyecto conjunto que tuviera un componente social. «La otra motivación por la que decidimos embarcarnos en este proyecto es que todas las políticas de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y consultorías que se hacen van muy orientadas a empresas como un ente vacío de personas. Nosotros queríamos, a través del mensaje, acercarnos a las personas. Ese matiz para nosotros ha sido muy importante», recuerda Enrique Acosta.
Actualmente, Oh my work! destina sus servicios a empresas, aunque buscan, en un futuro, que «cualquier persona pueda comprar el curso de forma independiente». La andadura de la empresa es breve, ya que tiene menos de un mes de vida, pero los socios de esta aseguran que «ha sido alucinante la oleada de gente» que les ha escrito para interesarse por el proyecto y por implementar medidas para favorecer la conciliación. Las redes sociales han jugado un papel importante en la difusión del proyecto de esta firma aragonesa, ya que también empresas ajenas a Aragón se han puesto en contacto con ellos.
MÁS FELIZ, MÁS PRODUCTIVO
La start up Oh my work tiene un lema: «personas más felices son más productivas». Y añaden: «eso genera más beneficio» para las empresas. De este modo, Acosta explica que «las personas infelices, aunque tengan mucho talento, al final dejan un trabajo al no poder conciliar».
De forma general, en España y el resto de Europa «hay muchísimo que mejorar», apunta Acosta, aunque reconoce que «cada vez hay una sensibilidad mayor a escuchar qué se puede mejorar respecto a la conciliación y a la felicidad en el trabajo».
A pesar de ser una empresa nueva, sus fundadores tienen claro los retos de futuro. «Somos ambiciosos», reconocen desde Oh my work! Por un lado, la start up quiere crear un market place (una especie de mercadillo) de servicios y productos relacionados con la felicidad en el trabajo y también con la conciliación.
Por otro lado, la empresa también quiere abrirse al mercado exterior, primero a los países hispanohablantes y después a nivel europeo. «Es un tema que despierta mucho interés en el mundo occidental y no hay prácticamente marcas que se especialicen en la conciliación, por ello lo vemos como una oportunidad», afirma Acosta.
