La compañía DKV Seguros ha apostado por Zaragoza para diseñar su futuro e iniciar una "nueva etapa" en la historia de la compañía. La puesta de largo del proyecto en la capital aragonesa se vivió ayer como un hito más que relevante para la aseguradora, cuyo mejor símbolo es la torre suroeste del Word Trade Center (WTC), un edificio de 12.700 metros cuadrados y nueve plantas en el que ha invertido 25 millones de euros --entre la compra y adecuación de las instalaciones--. A la entrada del complejo se podía leer El Corazón de DKV está en Zaragoza, una ejemplo de la apuesta de la compañía por desarrollar su negocio desde la ciudad hacia el resto del país.

Se trata de un proyecto "largamente soñado", apuntó su presidente, Javier Vega de Seoane, en la inauguración de la sede central de la firma, que hace más de 15 años adquirió la aragonesa Previasa. Atrás también queda su antigua sede de Cesaraugusto en Zaragoza, desde la que se trasladó a comienzos de este año.

A la jornada, que contó con un acto institucional, entrega de premios, un concierto de Antonio Orozco y hasta fuegos artificiales, asistieron, entre otros, la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, el consejero de Economía, Francisco Bono, el presidente del Consejo de Cámaras, Manuel Teruel, así como con los principales responsables de la compañía y de su matriz alemana Munich Re, con su presidente, Nikolaus van Bomhard, a la cabeza. Este recordó que la inversión, realizada en el 2013, llegó en un momento "complicado" para España pero recalcó la "confianza" en el equipo directivo.

MÁS EMPLEO

En el nuevo edificio, que la propia compañía define como "funcional, sostenible, saludable, abierto a la sociedad y contenedor de arte", trabajan ya unas 300 personas, aunque el objetivo es "casi doblar el número de empleados en los próximos años", destacó el consejero delegado de DKV, Josep Santacreu. No obstante, no hay previsión de un incremento de la plantilla "muy grande" a corto plazo, aunque el "crecimiento sostenido" del grupo permitirá incorporaciones de trabajadores, añadió.

Desde la torre de DKV en el barrio del Actur, la firma dará servicio a más de dos millones de clientes en toda España y formará a los 2.000 empleados del grupo. El grupo prevé cerrar el 2014 con 700 millones de euros de facturación y unos beneficios "muy razonables", según aseguró Seoane, que se mostró orgulloso de ser, aunque "no los más grandes", sí "los primeros en calidad y en estrategia de responsabilidad social corporativa".

De esta forma, la filosofía que encierra la nueva etapa y el recién estrenado edificio de DKV se resume, según Santacreu, con una frase: "Para cuidar a los clientes hay que cuidar a los empleados". Algo que quiso dejar claro en esta nueva etapa caracterizada por su firme apuesta por la responsabilidad social corporativa. No en vano, DKV está considerada como una de las mejores empresas para trabajar en España, tal y como acredita el premio Best Place to Work, lista en la que figura desde el año 2009. Santacreu dijo que para que una empresa sea competitiva, es necesario que sus empleados estén comprometidos, y para ello es "imprescindible un entorno de confianza y satisfacción".

EL NUEVO EDIFICIO

Todas estas cualidades las reúne la nueva torre de DKV. El edificio, que encarna los valores de la compañía, está pensado para "el trabajo en equipo y la colaboración", además de ser "un referente en la sostenibilidad y eficiencia medioambiental" y una apuesta por la salud y el arte. Así, dispone de una sala de formación para los empleados, aparcamiento de bicicletas, gimnasio, salas de relax y lectura, una cafetería en la última planta del edificio y sala de lactancia. Además, cada piso se ha convertido en un espacio de arte.

El 60% de la energía que utiliza el edificio procede de fuentes renovables y la tecnología también está muy presente en el edificio, que posee control de calidad del aire con vegetación, sistema de clima domotizado, iluminación LED con regulación automática en función del aporte de luz natural, filtros solares en los cristales de fachada, entre otras prestaciones.