Las cajas de ahorros siguen, poco a poco, tomando posiciones en los bancos, pero con cuidado de no saltarse las reglas que de forma tácita ha marcado el gobernador del Banco de España, Jaime Caruana. Al gobernador no le gusta que se mezclen ambos negocios, aunque la ley no lo prohíbe, y eso es suficiente para que las cajas de ahorros tomen nota.

La tesis del supervisor es que se pueden comprar bancos siempre que sea con la finalidad de integrar las oficinas en la red de la propia caja. El Banco de España es contrario a que se mantenga el banco como segunda marca. El presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), Juan Ramón Quintás, declara que este criterio es "razonable". No obstante, otras fuentes del sector ven en las directrices de Caruana un corsé para la capacidad de crecimiento de las cajas.

Casi una docena de cajas de ahorros tienen participación en una veintena de bancos. A mediados de diciembre, Unicaja anunció un aumento de su participación hasta el 5% en el Banco de Andalucía. Sin embargo, desde que Jaime Caruana está al frente del Banco de España (julio del 2000) ninguna caja ha comprado un banco de negocio similar --banca minorista-- para mantenerlo como segunda marca.

Como mucho, se han comprado o creado bancos para hacer banca privada, con clientes de alto patrimonio, un negocio que no es propio de las cajas. En este segmento, Caja Madrid tiene Altae y participa en Inversis. Unicaja posee el Banco Europeo de Finanzas. Caixa Galicia ostenta el 37% de Banco Etcheverría; y la Kutxa, el 100% de Banco Madrid. En la publicidad de estos bancos, se hace notar que participan del "buen hacer" de "una de las primeras entidades financieras del país".

PARTICIPACION FINANCIERA El Banco de España no rechaza estas operaciones. Tampoco se opone a que las cajas entren en la banca con una finalidad financiera --para cobrar el dividendo--, sin participar en la gestión.

La Caixa siempre ha defendido el carácter puramente financiero de su participación del 15% en Banc Sabadell, que acaba de ganar la batalla en la compra del Atlántico. También es financiera --sin acceso a la gestión-- la presencia de Unicaja en Banco de Andalucía, o la de la Kutxa y la BBK en Banco Guipuzcoano.

EXPERIENCIAS La reciente oferta de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) por el Banco Atlántico, que no consiguió su objetivo, tenía el propósito declarado de integrar las nuevas oficinas en su red. Asimismo, cuando hace unos meses un grupo de cajas andaluzas y Bancaja se interesaron por el Zaragozano, el Banco de España, de forma sutil, les hizo llegar el mensaje de que no convenía mezclar: "Las cajas tienen que ser cajas; y los bancos, bancos".

Las únicas experiencias que hoy sobreviven contrarias a este criterio nacieron antes de la era Caruana . El control de Banco de Valencia por parte de Bancaja arranca de la primera parte de los años 90. Caixanova es propietaria del 50% de Banco Gallego desde 1998. Ambos bancos funcionan como segundas marcas de sus cajas y han contribuido a la implantación en su territorio.