La Autoridad Bancaria Europea (EBA) ha "reactivado" sus directrices sobre moratorias de crédito, que había dejado decaer desde el pasado 30 de septiembre y que se aplicarán ahora hasta el 31 de marzo de 2021, después de evaluar la evolución de la pandemia de covid-19 y, en particular, el impacto de la segunda oleada y de las restricciones gubernamentales adoptadas en muchos países de la UE.

Se trata de un marco general que después deben aplicar los Estados miembros y el sector bancario de cada país. De hecho, en España, esa moratoria ya se ha aplicado parcialmente despe el pasado 17 de noviembre con la moratoria aprobada por el Gobeirno para los créditos del ICO.

Con la reactivación de este régimen especial para el tratamiento de las moratorias de crédito con o sin respaldo público, la EBA "reconoce las circunstancias excepcionales de la segunda ola de Covid-19".

"Esta reactivación garantizará que préstamos que antes no se beneficiaban de la moratoria puedan también beneficiarse ahora", ha destacado la institución presidida por el español José Manual Campa, que ha subrayado que los bancos siguen desempeñando un papel "de suma importancia" para garantizar el flujo continuo de préstamos a los clientes.

Salvaguardias contra el riesgo

Asimismo, la EBA ha indicado que estas directrices revisadas, que se aplicarán hasta el 31 de marzo de 2021, incluyen salvaguardias adicionales contra el riesgo de un aumento indebido de las pérdidas no reconocidas en el balance de los bancos.

En consecuencia, únicamente los préstamos que se suspendan, pospongan o reduzcan en virtud de una moratoria de pago general de no más de nueve meses, incluidas 'vacaciones de pago' concedidas anteriormente, pueden beneficiarse de la aplicación del régimen especial.

Además, se solicita a las entidades que documenten ante su supervisor planes para evaluar que las exposiciones sujetas a moratorias generales de pago "no sean poco probables de pagar", lo que permitirá a los supervisores tomar medidas apropiadas.