Aragón crece de forma "sana y equilibrada" y, además, lo hace por encima de la media nacional y de la zona euro. Esta es, en líneas generales, la lectura que hizo ayer el consejero de Economía del Gobierno de Aragón, Eduardo Bandrés, durante la presentación del balance de la economía aragonesa en el 2004. Un año en el que la comunidad crecerá el 3%, según las previsiones del Ejecutivo.

Esta tasa se apoya en las cifras del tercer trimestre del año, en el que el Producto Interior Bruto (PIB) avanzó un 2,8% en Aragón --dos décimas por encima de la media nacional y un punto sobre la zona euro--, con lo que "ya son dos años en los que la economía aragonesa crece más que la nacional", indicó Bandrés.

Pese a ello, en el cuarto trimestre sólo repuntará el sector servicios, mientras que construcción e industria sufrirán una ligera desaceleración. Ello se explica por el deterioro económico registrado a nivel mundial en la segunda mitad del año, debido al encarecimiento del precio del petróleo.

LA INDUSTRIA REPUNTA Con todo, el consejero de Economía elogió el comportamiento de la industria en Aragón, que registra una "clara recuperación", con un crecimiento del 3,2% en el tercer trimestre, aunque las previsiones apuntan que el sector concluirá el año con una tasa del 2,7%. La ralentización en el cuarto trimestre --2,5%-- coincide con las jornadas de paro técnico de General Motors (GM) España.

Por otro lado, el sector servicios también ha sufrido una moderada aceleración que proseguirá hasta finales de año. Sin embargo, la construcción "ha frenado su ritmo de crecimiento", pasando de tasas "frenéticas, que no eran sostenibles a medio plazo", a niveles del 3,5% en el tercer trimestre, aunque el sector "mantiene el dinamismo", sostuvo el titular de Economía.

En definitiva, "tan significativo es crecer como la forma en la que se crece", afirmó Bandrés, ya que el peso de la economía aragonesa "comienza a distribuirse entre todos los sectores", con una base "estable y dinámica".

Las exportaciones también vieron moderar su impulso, aunque avanza a tasas de entre el 5 y el 6% --por encima del PIB aragonés--, con lo que la balanza comercial todavía presenta superávit, pese a que "el fuerte dinamismo de la demanda interna tira de las importaciones", concretó el consejero de Economía.

Desde el punto de vista de la demanda, Bandrés también se mostró optimista, principalmente, por "la aceleración de la inversión en bienes de equipo que anticipa nuevos crecimientos" y por el consumo familiar que "sigue tirando fuerte".

PREVISIONES PARA EL 2005 La pauta del 2004 continuará el próximo año, con una aceleración industrial y de los servicios, así como una moderación de la actividad constructora. Sin embargo, el crecimiento subirá dos décimas hasta el 3,2%, siempre que se estabilicen los precios del petróleo y del dólar, y se recupere la economía europea. También dependerá de la subida de los tipos y del ajuste en GM, aunque esta actividad "podría ser absorbida por otros acontecimientos", comentó Bandrés.

Entre ellos, la Expo del 2008, cuyos efectos "no se notarán hasta el año 2006", concluyó el consejero de Economía aragonés.