Un cambio revolucionario, pero sin prisas. A partir del martes entrará en vigor el real decreto de cálculo de las tarifas reguladas de la luz (PVPC) aprobado por el Gobierno, con el que estas fluctuarán al ritmo del mercado en vez de estar sujetas a un precio fijo trimestral fijado en subasta. Las eléctricas tienen tres meses, hasta el 1 de julio, para adecuar su facturación al nuevo sistema. Durante ese periodo, la referencia seguirá siendo el precio establecido por el Gobierno para el primer trimestre para los más de 16 millones de usuarios con tarifa regulada.

La nueva fórmula tiene varias ventajas. La primera, según Soria, es un ahorro de entrada de unos 500 millones para los usuarios. De esta cantidad, unos 300 millones de deben a que el precio del mercado ha sido un 45% inferior al establecido por el Gobierno durante el periodo transitorio enero-marzo. Las compañías tendrán hasta finales de agosto para aplicar esta rebaja.

Al mantenerse durante el periodo transitorio hasta el 1 de julio el mismo precio de referencia que en el primer trimestre es posible que las compañías tengan que aplicar más devoluciones o refacturar al alza. Todo dependerá de cómo evolucione el mercado. En todo caso, según el ministro, los usuarios se ahorrarán el sobreprecio que se pagaría de mantenerse el sistema de subastas trimestrales, que implicaba costes por coberturas financieras. A lo largo de cinco años, esta variable supuso un sobrecoste de 1.671 millones. En este primer trimestre hubieran sido otros 200 millones, afirmó.

REVOLUCIÓN POCO VISIBLE La gran revolución del sistema, la aplicación del precio por horas, será poco visible. Solo podrá aplicarse en los casos en los que se tenga un contador digital (inteligente) y en los que además esté programado para calcular 720 variaciones de precio al mes o 1.440 cada dos. Entre cuatro y seis millones de consumidores tienen hoy uno de estos medidores, pero poco más de un millón están preparados para trabajar en telegestión, según los expertos. A finales de este año tendría que haberse renovado el 35% del parque en un proceso que debe culminar en el 2018.

Lo cierto es que la mayoría de hogares tiene aún un contador analógico o no tienen adecuado el digital. Para estos, el cálculo de la tarifa se hará con el promedio del precio de mercado en el periodo de facturación (uno o dos meses). Red Eléctrica de España (REE) será la encargada de hacer la estimación y podrá consultarse en su web (www.ree.es). Las compañías están obligadas a ofrecer a los clientes un contrato estándar con tarifa fija durante un año. Este precio será superior al del mercado, pero será fijo. Las primeras ofertas anuales podrán consultarse en la web de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (www.cnmc.es) a partir del 15 de abril. En el momento de contratarla se tendrá que hacer constar si se desea la renovación automática y, en todo caso, las comercializadoras "deberán comunicar el nuevo precio al consumidor un mes antes de que venza el contrato anual".

Además, los usuarios podrán salir de la tarifa regulada y acudir al mercado libre, como ahora. Con el objetivo de que aumente la competencia, Industria ha rebajado de los 100.000 clientes actuales a 25.000 el umbral necesario para que cualquier comercializadora pueda vender también la tarifa regulada. Eso supone incorporar "potencialmente siete nuevas comercializadoras de referencia". A las cinco de referencia actuales (Endesa, Iberdrola, Gas Natural, E.on y HC) se les sumarán otras tres, según el ministerio.

El departamento de Soria habilitará una herramienta, en su web (www.minetur.gob.es) y de la de la CNMC, en la que cada consumidor introduciendo sus datos (potencia, periodo de facturación y consumo) podrá comprobar si su recibo es correcto y adecuado a los precios mayoristas del periodo. Todos estos cambios afectan al componente de energía del precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC), que sustituye a la anti-