LOS EMPLEADOS de Edesa dieron ayer por finalizado el encierro que mantenían en la fábrica de Basauri (Vizcaya) desde hace 140 días en un intento baldío por intentar salvar sus puestos de trabajo. Los cerca de 230 empleados se han turnado para permanecer durante 24 horas al día en las instalaciones de la planta para exigir que no fuera arrastrada por la crisis de su matriz, Fagor Electrodomésticos.