El sector farmacéutico reivindica su papel como motor de la actividad económica en España. Según el estudio 'El valor del medicamento desde una perspectiva social', elaborador por el centro de investigación económica Weber en colaboración con la patronal Farmaindustria, "cada puesto de trabajo en el sector farmacéutico crea otros cuatro adicionales". El efecto económico del sector lo cuantifica el mismo estudio en un ejemplo: "Cada 1.000 euros de producción en medicamentos generan hasta 2.300 euros en otros sectores".

La patronal enarbola el estudio dado a conocer este jueves con el deseo de recibir mejor trato de la Administración en unos tiempos de recursos limitados y concienciar a la opinión pública de la relevancia del sector para el conjunto de la economía. Para el sector, el discurso habitual que reclama empleos de calidad para la economía española se cumple indudablemente en el sector farmacéutico. "La industria farmacéutica genera en España unos 40.000 empleos directos, de los que el 59% son profesionales con estudios universitarios, y es el sector de la alta tecnología con más empleo (un 58% del total)", concluye el estudio. De estos datos se deriva que el empleo inducido por el sector asciente a unos 200.000 puestos.

I+D

En unos momentos en los que se reclama más inversión en investigación y desarrollo, el farmacéutico es uno de esos sectores indisolubles de la I+D, ya que es base de su filosofía como sector. Por ello, es el sector con el porcentaje más alto de personal dedicado a investigación, en torno al 12,4%. Un total de 4.860 profesionales en España que suponen a su vez el 47% del empleo en I+D de los sectores de alta tecnología.

Exportaciones

En términos de exportaciones, la situación del sector es optimista tras incrementarse el 45% en 10 años, hasta situarse en torno al 27% del total de las exportaciones españolas en alta tecnología.

Para los autores del estudio, todas estads dimensiones económicas sitúan al sector farmacéutico como uno de los más importantes de la economía española, en la medida en la que "contribuye a generar empleo de calidad, productividad, progreso tecnológico y competitividad internacional".