La transición energética (desde la combustión de carburantes fósiles a las energías renovables), puede crear 24 millones de empleos, cuatro veces más de los que se perderán (unos seis millones) hasta el 2030. Esta es la principal conclusión del informe publicado ayer en Ginebra (Suiza) por la Organización Mundial del Trabajo (OIT) bajo el título Perspectivas sociales y del empleo en el mundo 2018: Sostenibilidad medioambiental, que cifra en 18 millones la creación neta de puestos de trabajo en el mundo vinculada a la llamada economía verde.

Según el citado informe, cumplir el Acuerdo de París del 2015 y adoptar las medidas de transición energética necesarias para limitar a dos grados centígrados el calentamiento de la Tierra tendrá efectos muy beneficiosos para el empleo en el mundo. España se sitúa entre los países que más ventajas puede extraer, según las conclusiones preliminares del director de la Oficina de la OIT en el país, Joaquín Nieto.

Aunque el estudio detallado sobre España no se presentará hasta dentro de unas semanas, Nieto avanzó que la transición energética ofrece oportunidades de empleo muy importantes para el país en el sector industrial del automóvil (por el desarrollo del coche eléctrico), en la construcción (por la medidas de eficiencia energética en las viejas y nuevas viviendas) y en el sector eléctrico (por el impulso de las energías renovables). «España estaría bien posicionada si actúa con celeridad. Es el momento de reorientar la salida de la crisis» y de encauzar el ansiado cambio del modelo productivo, afirmó Nieto en un encuentro con los medios de información. En su opinión, España está «en buenas condiciones» para impulsar los efectos positivos del cambio «y mitigar los negativos», como por ejemplo, las pérdidas de empleo vinculadas al carbón.

El estudio de la OIT, presentado de forma sincronizada en diferentes países del mundo, señala que la mayoría de los sectores de la economía global se beneficiarán de la creación neta de empleos. De los 163 sectores analizados por la organización, sólo para 14 de ellos se prevén pérdidas de empleo de más de 10.000 puestos de trabajo a nivel mundial. Sólo dos sectores, la extracción y la refinación del petróleo, muestran pérdidas de 1 millón o más empleos. En el sector de la electricidad, se estima que al menos 2,5 millones de empleos serán creados en la electricidad basada en fuentes renovables.