El empresario Manuel Solano Zaragozano, de Tiermas y tras probar suerte en Argentina, instaló en 1919 un taller de reparación de neumáticos cerca del paseo Independencia. El parque de vehículos de Zaragoza en aquel entonces era de 272 (40 turismos). En 1930 el negocio se especializó en la reparación y venta de vehículos, un sector en el que sigue la empresa familiar 85 años después. Ahora, en la Ciudad de Automoción, el servicio al cliente permite ofrecerle cafetería, peluquería, correduría de seguros y hasta un centro de formación del sector del automóvil para especialización de alumnos de FP.