Si empleamos la terminología escolar, los políticos catean. Y mucho. Los empresarios reunidos en Alicante en el XVII Congreso Nacional de la Empresa Familiar apenas otorgan un 1,08 sobre 9 a la situación económica. Peor que el año pasado, en el que era el 1,66.

Es uno de los resultados que arroja la encuesta rápida que se realiza cada año durante la celebración de esta cumbre empresarial y que presentará el presidente del Instituto de la Empresa Familiar (IEF), Javier Moll, cuando pronuncie su discurso de clausura mañana junto con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

Los constantes casos de corrupción que se han producido en el último año han hecho mella en el ánimo empresarial. De ahí el resultado del barómetro realizado esta misma mañana.

En cambio, en el ámbito económico, la valoración, es mucho mejor, con un 4,26 sobre 9, frente a poco más de 2 del año pasado. Los patronos tiene bien identificada la enfermedad: la política, no la economía.