La imposibilidad de afrontar sus pagos y deudas llevó a 1.189 empresas españolas a declararse en concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) en el segundo trimestre, lo que supone un incremento del 5,5% respecto al mismo periodo del año pasado. Según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), las firmas más pequeñas coparon las solicitudes, ya que el 57,3% de ellas contaba con menos de seis empleados, y entre éstas, el 30,5% no tenía ninguno. Respecto a la actividad que desarrollaban, el 22,1% pertenecía al comercio, el 16,4% a la construcción y el 14,4% al resto de servicios.

Además de esas 1.189 empresas, un total de 268 familias se declararon en concurso de acreedores, un 0,7% menos que en el segundo trimestre del 2016.

En tasa intertrimestral (segundo trimestre del año sobre el primero), el número de deudores concursados aumentó un 10,5%, con un repunte del 1,9% en el número de familias declaradas en concurso y del 12,6% en el caso de las empresas.

Por comunidades, Cataluña, Madrid y Comunidad Valenciana fueron las regiones con mayor número de declaraciones de concurso en el segundo trimestre, dado que acapararon la mitad del total de procedimientos. En concreto, Cataluña sumó 335 concursos, Madrid registró 267 y Comunidad Valenciana, 175. Por su parte, las regiones con menos suspensiones de pagos fueron La Rioja (4), Navarra (17), Cantabria (17) y Extremadura (19).

La comunidad que más recortó su número de deudores concursados durante el segundo trimestre fue La Rioja, con un descenso interanual del 55,6%, hasta cuatro procedimientos. Por el contrario, Canarias fue la región que más los incrementó, con un alza del 48,1%, sumando en total 40 concursos. En Aragón, un total de 39 empresas se declararon en concurso, lo que supone una subida del 18,1% respecto al mismo periodo del año anterior. El número total de deudores en la comunidad, incluidas las personas físicas, se elevó a 56, un 21,7% más que un año antes.

Las empresas del sector comercial lideraron los concursos de acreedores en el segundo trimestre y, además, fueron las más pequeñas las que más se acogieron a este procedimiento. Los comercios con hasta cinco trabajadores suponen el 71,1% de los que presentaron un concurso entre los meses de abril y junio.

Por antigüedad, el 32,3% de las comercios concursados llevaba 20 años o más en funcionamiento. Los primeros años de actividad de la sociedad también tienen una gran incidencia: el 22,8% de comercios que presenta suspensión de pagos o quiebra existe desde hace menos de cuatro años.

Se rompe así la tendencia de la época de la crisis, cuando en el 2009 hasta el 74,3% de las empresas concursadas eran del sector de la construcción. Según el organismo, el 16,4% de sociedades en quiebra o suspensión de pagos se dedicaba a este sector en el segundo trimestre de este año. A las empresas constructoras, les siguen ahora las de servicios (hostelería, transporte y almacenamiento, y otras), con el 14,4%.

Del total de concursos, 1.359 fueron voluntarios (un 4,8% más que en el segundo trimestre del 2016), y 98 necesarios (un 2% menos), mientras que por clase de procedimiento, los ordinarios aumentaron el 8,2%, y los abreviados, el 3,7%.

LA ANTIGÜEDAD DE LAS FIRMAS

En cuanto a la forma jurídica, un 79,9% de las compañías eran sociedades de responsabilidad limitada; y del total, el 34,2 % se situaban en el tramo más bajo del volumen de actividad (menos de 250.000 euros).

El INE, que también desglosa sus datos en función de la antigüedad de las firmas, concluye que el 22% de las concursadas en el segundo trimestre había sido constituida hacía 20 años o más, mientras que el 20,1% tenía menos de cuatro; de estas últimas, el 25,1% se dedicaba al comercio como principal actividad.