El Centro de Proceso de Datos (CPD) de Enagás en Zaragoza fue inaugurado ayer oficialmente como una de las infraestructuras energéticas destacadas de Aragón tras realizar una inversión de nueve millones de euros. La instalación, que se puso en marcha en el 2013, se ha convertido en el segundo centro de proceso de datos de la compañía y se encuentra interconectado con el que ya tiene en Madrid a través de un anillo de fibra óptica. Ambos trabajan de forma conjunta para reforzar el buen funcionamiento del sistema gasista y garantizar la seguridad de suministro de gas natural en todo el territorio nacional.

Ayer, el consejero delegado de Enagás, Marcelino Oreja, y el consejero de Industria e Innovación del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, inauguraron este complejo --ubicado en la autovía de Madrid-- junto a los laboratorios centrales y al centro de I+D que ya tenía la compañía en las proximidades de Zaragoza.

Oreja y Aliega subrayaron que el CPD de Zaragoza se ha convertido ya en un referente internacional en eficiencia energética. Así, gracias a su planta de trigeneración alimentada por gas natural, reduce el consumo un 30% respecto a centros similares y un 40% las emisiones de CO2 a la atmósfera. Así, parte de la energía térmica residual generada en la combustión del gas se aprovecha para alimentar el sistema de calefacción del laboratorio de contadores de alta presión y el resto se transforma en la energía frigorífica necesaria para la refrigeración de los equipos de tecnología de la información.

Ello ha supuesto a la planta la certificación Tier IV por su máximo nivel de seguridad y fiabilidad. Un reconocimiento que poseen tres plantas en España y nueve en Europa, siendo ésta la primera del sector energético en conseguirlo.

Aliaga, que recordó ayer que el proyecto fue declarado como "de interés autonómico" por la DGA para así agilizar trámites y plazos y dar un mensaje de que Aragón es "pro-industria, pro-innovación y pro-tecnología", destacó la "cultura gasista" de la comunidad gracias a proyectos como el gasoducto Barcelona-Bilbao que atraviesa el territorio. Todo ello, ha favorecido la creación de una red en torno a la que han dejado en Aragón un desarrollo gasista "envidiable", subrayó. Oreja recordó al respecto que, además de este complejo, la compañía cuenta con un almacenamiento estratégico de gas natural en Serrablo, una red de 640 kilómetros de gasoductos de alta presión, una estación de compresión en Zaragoza y tres centros de transporte en Caspe, Serrablo y Zaragoza. En los mismos trabajan unas 150 personas.