Balón de oxígeno, aunque pequeño, para el carbón turolense. La paralización temporal de una veintena de centrales nucleares en Francia, provocada por un problema con elementos críticos de su construcción, ha disparado la exportación al territorio galo de energía eléctrica española. Este incremento, a su vez, ha provocado que las compañías eléctricas aumenten la compra de carbón para que sean las centrales térmicas las que cubran ese repunte de la demanda. Eso es precisamente lo que ha hecho Endesa, que acaba de cerrar un contrato de suministro con Samca para hacerse con más de dos millones de toneladas de carbón entre el 2017 y el 2018, tal y como adelantó ayer Diario de Teruel.

Su decisión va a suponer que Samca incorpore en las próximas semanas a cerca de 60 trabajadores de contratas, una cifra que, sin embargo, no va a permitir compensar la pérdida de empleo registrada en el 2016. El año pasado, el goteo de despidos fue una constante y en las contratas se eliminaron unos 200 puestos de trabajo debido al cierre de la mina de interior de Ariño (propiedad de Samca) y al desplome de la actividad. De hecho, Endesa estuvo más de tres meses sin comprar carbón en Teruel.

«Es una buena noticia porque el contrato nos garantiza algo de trabajo para la gente de la zona durante estos dos años, pero la inquietud a largo plazo sigue estando ahí», indicó ayer a este diario el presidente del comité de Samca, Sebastián Ruiz. En este sentido, recordó que lo que «de verdad» garantizaría el futuro de la minería turolense sería que Endesa decidiera acometer la inversión de 230 millones de euros que necesita este complejo para prolongar su vida útil dos décadas. «Si la térmica no invierte antes de junio del 2020 no habrá futuro para el sector», insistió Ruiz, que apuntó que para ello también es de vital importancia que el Gobierno central vuelva a priorizar la quema de carbón autóctono dentro del mix energético nacional.

No en vano, el fenómeno de Francia está sirviendo para que el sector del carbón, en pleno proceso de desmantelamiento, reivindique el carácter estratégico que juega en este mix energético por ser la única fuente de generación propia en condiciones de respaldar el sistema eléctrico y garantizar el suministro en situaciones especiales.

LIGNITO MÁS CARO

La parálisis nuclear de Francia, que podría demorarse hasta final del 2017, se produce en un momento en el que el precio del carbón internacional está repuntando mucho, lo que favorece al lignito turolense, ya que es altamente competitivo, y a la térmica de Andorra.

Con todo, el contrato por dos años de Endesa con Samca ha sorprendido mucho porque la eléctrica, en los últimos tiempos, venía comprando el carbón mes a mes.