Endesa ha anunciado una revisión de su central de ciclo combinado (gas natural) de As Pontes con una inversión de 29,5 millones de euros que incluye diversas mejoras con las que ganará "fiabilidad y disponibilidad", según ha informado la compañía.

La eléctrica anunció el año pasado el cierre de los cuatro ciclos convencionales de carbón de esta central térmica (1.468 megavatios), pero mantiene el ciclo combinado de gas natural (850 megavatios) que que llega a través de un gasoducto que enlaza con la regasificadora de Mugardos (puerto de Ferrol) y que ahora ha decicido modernizar a propósito de su revisión. El parón durará un periodo de 60 días y en él que trabajarán 280 personas ajenas a la compañía.

Según ha anunciado Endesa, las labores de mantenimiento incluyen sendas inspecciones mayores de las dos turbinas de gas además de una inspección menor de la turbina de vapor. Además, están programados una inspección robótica de los tres alternadores. La revisión incluye una inspección de los equipos auxiliares: bombas de circulación, de circuito cerrado, de circuito abierto y de vacío, de los Interruptores de generación y de motores, entre otros. También será inspeccionada la caldera utilizando drones en su interior.

Endesa aprovechará la revisión para implementar una serie de mejoras con las que la central ganará fiabilidad y disponibilidad. En concreto, eliminará la opción de consumir combustible líquido como sustituto del gas natural en caso de falta de este, ya que tal carencia nunca se ha producido y, además, "esa posibilidad no sería ambientalmente sostenible". También se actualizará el sistema de control de la central, que contará con nuevas capacidades para evitar ciberataques.

Asimismo serán actualizados los sistemas de excitación de las turbinas y los arrancadores estáticos de estas. También se rediseñarán las válvulas de 'by pass' de vapor de la turbina hacia el condensador. Por último Endesa incorporará una serie de mejoras para hacer la central más competitiva, reduciendo los tiempos y los costes de arranque. "Con ello ganará flexibilidad ahora que el crecimiento de la eólica demanda grupos capaces de absorber los huecos de producción que las energías renovables no puedan cubrir", ha explicado la empresa. Para este mismo fin, se implementará una tecnología que permita mantener la turbina de vapor caliente en periodos de parada cortos, de forma que el arranque siguiente resulte más rápido y eficiente.