España realizó ayer la última subasta de deuda del año logrando cerrar con brillantez su programa de financiación a largo plazo. En concreto, captó 2.615 millones en obligaciones con distintos vencimientos con sustanciales rebajas en el interés.

De los 2.615 millones conseguidos, 904,5 salieron con vencimiento en el 2019 y un interés marginal del 0,896%, inferior al 1,412% anterior; otros 587,54 millones con vencimiento en el 2023 se colocaron al 1,588%, frente al 1,941% comparable, en tanto que los 1.123 millones de euros restantes, con vencimiento en el 2024, se adjudicaron con una rentabilidad del 1,752%, desde el 1,850% precedente.

Rodrigo García, analista de XTB, explicó que el hecho de que los costes hayan disminuido ligeramente en comparación con la última emisión de deuda refleja la confianza creciente con la que vuelven a contar los inversores en los mercados de renta fija, al tiempo que ponen de manifiesto "la escasez de alternativas rentables a la hora de buscar rentabilidades".

Asimismo, llamó la atención sobre el hecho de que ha pasado mucho tiempo desde la última emisión de deuda a estos mismos plazos, y durante este tiempo los tipos de interés no han cesado de bajar, por lo que es lógico "que los costes de financiación hoy hayan salido mucho más bajos".

En su opinión, el hecho de que los tipos de interés sigan cayendo corresponde a "las agresivas medidas del Banco Central Europeo para combatir la deflación y fomentar el crecimiento". Esto ha permitido a todos los países de la zona del euro reducir sus costes de financiación, aunque el recorte es más acusado en las economías periféricas.

RENTABILIDAD Aunque España se financia a costes muy inferiores a los de los últimos años, Rodrigo García advirtió de que el mayor problema en materia de financiación no son los tipos de interés sino la "brutal" cantidad de capital emitido, que en estos momentos ya está alrededor del 100% del PIB.

La subasta fue muy positiva, ya que a la rebaja de la rentabilidad se unió el gran interés por parte de los inversores, que solicitaron más de 5.205 millones de euros, lo que sitúa la rato de cobertura, que es la proporción entre la demanda y el importe adjudicado, en 1,9 veces. Con la de ayer el Tesoro ha concluido su programa de emisiones de este año.